Cabe destacar, en primer lugar, que no soy ni he sido nunca político de profesión ni he militado jamás en ningún partido político, en consecuencia, debo empezar por disculparme al atreverme a dirigirles este mensaje en un tema que Uds., con toda seguridad, manejan mucho mejor que yo.
Pero es el caso que, con mucho dolor, me entero por publicaciones en los diferentes medios de comunicación que algunos, pocos gracias a Dios, representantes de la oposición democrática, con razones, a mi modo de ver disparatadas, anuncian que se distancian de la MUD y lanzarán sus propias candidaturas en forma personal ¿Qué vaina es esa? ¿Y es que hacer oposición significa tratar de obtener un “cambur”, o cambiar al gobierno?
Mi opinión, y perdonen el personalismo pero estoy seguro que miles y miles de compatriotas me acompañan en la idea, es que hacer oposición a un gobierno determinado implica que estamos convencidos de que lo están haciendo MAL, y consecuencialmente debemos intentar derrotarlo por las vías democráticas con las armas que tenemos a la mano, es decir, con una MAYORIA de votos en su contra. ¿Y cómo se logra esto? Justamente como lo estamos tratando de hacer, formando una unidad de opositores que constituyan esa mayoría, pero en ningún caso fraccionando dicha unidad por complacer a un candidato “ególatra” que cree tener, él solo, el número de votos para triunfar en el cargo de que se trate.
Argumentan, por ejemplo, que el bipartidismo no le permite al pueblo pensar en otras opciones mejores. ¿Y quién les está clausurando el cerebro para que no piensen como les dé la gana? O que esos partidos son casi tan responsables como el gobierno, porque ellos “permitieron” que el pésimo estado de los servicios, y toda la conocida lista de males que nos aquejan, se agravaran en lugar de solucionarse. ¿Y cómo podían arreglarlo? … Además si estos señores, los que quieren candidatearse por cuenta propia, sabían como arreglar esos problemas ¿Por qué no lo hicieron? Ellos también estaban allí como opositores (al menos teóricamente)
Luego del escrutinio correspondiente ¿No les dará vergüenza cuando aparecen las cifras y resulta que obtuvieron 0,001 % del total? ¿Qué lograron? Nada, absolutamente nada, salvo haberle “robado” unos cuantos votos al candidato lógico de la oposición, lo que, tal vez, le cueste perder la elección con el consiguiente daño para la idea de mejorar el ejercicio del gobierno. Daño que, supongo, quedará permanentemente en la conciencia de estos egoístas sin visión de futuro.
Poniendo las cosas en su justo lugar, lo que el pueblo de Venezuela está pidiendo a gritos, es cambiar en forma integral, radical, un gobierno malo por uno mejor, que nos ofrezca justicia, desarrollo económico, que desaparezcan para siempre esas largas y lamentables colas de compatriotas llevando sol y agua para comprar un rollo de papel higiénico, seguridad personal, educación de calidad, tranquilidad, paz. Y no simplemente colaborar para que una serie de personajes generalmente desconocidos o “paracaidistas”, se enchufen en la administración pública para terminar de descomponerla o para algún fin distinto al que estamos buscando.
Hermanos, no por pensar diferente dejan de ser mis hermanos, los invito a que se den un ligero paseo mental por nuestra evolución política en la democracia, conseguida, con mucho esfuerzo, luego del período oscuro de Pérez Jiménez, ¿No recuerdan cuantas cifras electorales resultaron totalmente diferentes a las esperadas por el pueblo, precisamente por este fenómeno de “brincar la talanquera” buscando beneficios personales? De no haber sido asi, tal vez no estuviéramos pasando lo que estamos mal-viviendo. Vale la pena continuar el mismo camino por no tener el valor y la generosidad de renunciar a un posible beneficio personal, muy remoto por cierto, en aras del bienestar colectivo, en que Venezuela sea en verdad LA PATRIA que todos queremos.
