Las personas excedidas de peso tienen menos probabilidad de sobrevivir al cáncer y una razón podría ser una sorprendente desigualdad: los obesos reciben un tratamiento insuficiente.
Los médicos frecuentemente les aplican menos quimioterapia porque no basan la dosis en el tamaño, como deberían. Utilizan el peso ideal o limitan la dosis por temor a la cantidad de tratamiento que pueda soportar un paciente obeso. Sin embargo, la investigación demuestra que la gente pasada de kilos maneja mejor la quimioterapia que la gente de menor talla.
Incluso una pequeña reducción en la dosis idónea de quimioterapia puede mermar las probabilidades de sobrevivir, y los estudios indican que hasta el 40% de los pacientes de cáncer obesos han recibido menos del 85% de la dosis correcta para su talla.
Ahora, la mayor organización de médicos en Estados Unidos que tratan el cáncer, la Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica, intenta cambiar esa situación. El grupo ha adoptado directrices para suministrar dosis completas basadas en el peso para los obesos.
No se trata de agrandar las dosis, sino que es el tratamiento correcto para el tamaño del paciente, dijo el doctor Gary Lyman, oncólogo de la Universidad de Duke y quien encabezó el panel para redactar las directrices.
El tema de la dosificación se aplica a todos los tipos de cáncer tratados con quimioterapia: seno, colon, pulmón, ovarios e incluso enfermedades sanguíneas como la leucemia.
Esto afecta a muchas personas. Estar gordo no es sano, pero es la nueva «norma», ya que 60% de los estadounidenses tienen sobrepeso y más de una tercera parte de ellos son obesos.
Aplicar una quimioterapia reducida «podría resultar como que no recibieran tratamiento alguno», observó la Dra. Jennifer Griggs, especialista en cáncer de mama, en la Universidad de Michigan, que también trabajó en las normas.
¿Entonces por qué los médicos limitan las dosis?
Algunos médicos limitan las dosis de quimioterapia también porque el paciente tiene diabetes, problemas cardiacos u otras enfermedades que interfieren con la cantidad de tratamiento que pueden utilizar. Sin embargo, por lo general es porque los doctores temen seguir una fórmula estándar basada en el peso porque la dosis parece demasiado grande y temen dañar el corazón o el sistema sanguíneo, de acuerdo con Lyman.
Un estudio que publicó Lyman en la revista Nature en agosto dijo que una reducción del 20 % en las dosis de quimioterapia reducía las tasas de remisión y cura en la mitad, en experimentos con animales, y contribuían a que los tumores desarrollaran resistencia a los medicamentos. Otra investigación con seres humanos halló menores tasas de supervivencia entre quienes recibían menos qumioterapia.