En medio de la reducida avenida Venezuela por trabajos de Transbarca, conductores particulares observan, mientras se desplazan, que al iniciar el período escolar en Barquisimeto el congestionamiento en esa vía será infernal por cuanto les quitaron un importante espacio, si a ello se le agrega la entrada en funcionamiento del llamado sistema de transporte masivo.

No obstante, la premura con la que el Gobierno nacional concluyó los trabajos ha puesto en duda a los larenses sobre la efectividad o fracaso de este sistema, que destruyó parte de los espacios estructurales del oeste y centro de la ciudad.

Transbarca no es un transporte masivo

Efectivamente, de acuerdo al crecimiento poblacional, al incremento del parque automotor y a la falta de construcción de nuevas vías en Barquisimeto, se hace necesario la puesta en marcha de un sistema de transporte masivo.

Sin embargo, de acuerdo a la ingeniero Norah Farías, exdirectora de la Autoridad Metropolitana de Transporte Terrestre (AMTT), este sistema de transporte masivo no es precisamente Transbarca.

Para la especialista en el tema, el sistema al que se refiere, es aquel que traslada la mayor cantidad de personas en el menor tiempo posible, y aún este importante elemento no lo tiene la capital de Lara.

Describe Farías el Transbarca como un sistema de transporte que utiliza corredores exclusivos para movilizar en 110 autobuses, distribuidos en ocho rutas, unos 150 mil pasajeros a diario, es decir, menos del 10% del total de la población barquisimetana, de más de dos millones de habitantes.

Con toda esta limitante, dice Farías, “hay que rogar para que el Transbarca funcione, aunque el servicio ya es deficiente. Pese a todo hay que darle la bienvenida”.

Considera que la AMTT debe reestructurar el transporte convencional que se desplaza en la ciudad, porque es complementario del Transbarca.

Sobre el tema institucional de las competencias y responsabilidades, la ingeniero manifestó que si bien el Ministerio del Poder Popular para el Transporte puso en operatividad el Transbarca, es el municipio, haciendo valer la Ley del Poder Público Municipal, el encargado de asumir su autoridad y gobernabilidad en esta materia.

“Una cosa es que el ministerio construya la obra, pero las competencias son del municipio”, recalcó.

Destacó que le corresponde al municipio convertir realmente el Transbarca en una propuesta que contribuya con el desarrollo de la ciudad y le permita movilizar a todos los ciudadanos, y no a una minoría, como el caso planteado.

“Debe existir integración tarifaria, control de la autoridad y un sistema cerrado para ejercer la operación y mantener alejada la inseguridad”, recomienda.

Lo que merece Barquisimeto

Farías sostiene que a Barquisimeto le urge un sistema de transporte masivo, pero integrado, es decir, constituido por servicios de corredores exclusivos, conformado por buses de gran capacidad, tanto articulados como biarticulados, y dotados de una red de rutas alimentadoras que partan de todas las urbanizaciones, beneficiando a decenas de usuarios.

Este también debe poseer conexiones con algunos puntos para que haga las transferencias en terminales urbanos, los cuales, según el Plan de Desarrollo Urbano Local de Barquisimeto (PDUL), deberían desconcentrarse con servicios como bancos, supermercados y cines, al norte, oeste y Palavecino.

Optimista, opina que hoy se debería estar planificando qué sistema de transporte le conviene más a Barquisimeto en el futuro, proyectado para una agenda del año 2020, respecto a otras tecnologías.

En este sentido, precisa que los resultados lo determinarán los estudios que se lleven a cabo por las autoridades locales.

No resuelve problema del norte

Norah Farías señala que el Transbarca no resolverá, al menos, por los momentos, el “terrible” problema de movilidad de todas las personas que viven en comunidades del norte, pertenecientes a las parroquias El Cují, Tamaca y el municipio Crespo para llegar en el menor tiempo posible al centro de la ciudad.

Si no se resuelve el gran congestionamiento que se desarrolla a diario en la Intercomunal Barquisimeto-Tamaca, entonces las personas seguirán llegando retardadas a la avenida Libertador.

Recordó que según una propuesta formulada por el municipio en el año 1998, la mencionada Intercomunal se convertiría en corredor exclusivo del transporte, para evitar que las unidades de este servicio se mezclaran con los vehículos particulares, como ocurre desde siempre.
Subrayó que Barquisimeto demanda mejoras operativas hacia el norte, como nuevas vías y corredores exclusivos, entre otros.