Humo blanco salió de la reunión entre representantes del Sistema de Transporte Masivo para Barquisimeto (Transbarca) y el Sindicato Automotor del estado Lara, a propósito de las rutas alimentadoras que entrarán en funcionamiento a partir de hoy, cuando se espera la operatividad de los trolebuses.
Este viernes, los transportistas acudieron a las oficinas de Transbarca, en la Zona Industrial II, a objeto de establecer cómo servirán de apoyo. Uno a uno, Transbarca y unidad del transporte tradicional, saldrán a los recorridos por la avenida Libertador, Venezuela y avenida 20.
Erick Zuleta, presidente del sindicato y de la Federación Nacional del Transporte, declaró que aún tienen muchas expectativas y cierto temor entre los profesionales del volante, en el sentido de los ingresos económicos que pudieran disminuir, una vez operativo el Transbarca.
No obstante, manifestó el compromiso que tienen con el colectivo en prestar un buen servicio e informó que las mesas de trabajo funcionarán de manera permanente a fin de conocer los posibles aspectos a mejorar u otro tipo de sugerencias.
Catorce compromisos
Por otra parte, los transportistas esperan por el respeto y cumplimiento de los catorce acuerdos firmados por el Sindicato Automotor y el viceministro del Servicio de Transporte Terrestre, José Luis Bernardo, compromisos que se orientan a prestar un buen servicio de manera coordinada y también haciendo mención a las mejoras sociales que espera el sector transporte.
Dichos acuerdos, surgieron de las mesas de trabajos que realizaron a propósito de las rutas alimentadoras que complementarán al sistema de trolebuses.
Uno de los aspectos más significativos es conseguir la pensión a los conductores que tienen hasta más de 30 años de jornada al frente del volante, con el propósito de mejorar la calidad de vida, ahora que se encuentran en la terecera edad.
Asimismo, mencionan la necesidad de contar con unidades nuevas para el transporte tradicional. Desde hace años, no cuentan con el financiamiento del Gobierno nacional para mejorar los vehículos donde trasladan a los pasajeros.
Comprar una buseta con recursos propios, es casi una hazaña debido a lo costoso e inalcanzable que resulta en nuestros tiempos. No cuentan con capacidad de ahorro. “Lo que ganamos es para comer”, sostuvo uno de los conductores de la Ruta 1.
Por lo pronto, se organizan para participar de las rutas alimentadoras que funcionarán en las mismas vías por donde circularán los trolebuses, a pesar de las recomendaciones de los urbanistas y demás especialistas, quienes explican que no tiene ningún sentido la circulación de las busetas del transporte tradicional por la vía que servirá para el Transbarca.
El diseñador urbano, Orlando Rivas, fue uno de los que más criticó este asunto que el Mpptt no evita para el mejor funcionamiento del sistema.
