“Desde pequeño su pasión fueron las motos. Siempre tuvo una. La Jaguar negra con la que se estrelló era relativamente nueva, al parecer fue que se le coleó y cayó a la tierra”, así narró Aura Lucena, hermana de José Rafael Lucena Colmenárez, de 40 años, quien murió la noche del jueves en un accidente en el caserío El Pimpinal en la vía hacia Sanare.
El hombre llevaba el casco, pero no lo tenía puesto, por lo cual, al impactar contra el piso, el golpe fuerte lo llevó la cabeza, y por eso quedó sin signos vitales en el sitio del suceso. Desde hace tres años Lucena Colmenárez decidió entrar a las filas de la reserva militar, “siempre soñó con eso”.
El menor de ocho hermanos se encontraba en una reunión con sus compañeros, aparentemente ingiriendo alcohol, por lo que pudo haberle hecho perder el control de la motocicleta, donde tenía gran experiencia en su manejo. “Él siempre tomaba y no le pasaba nada. En esta oportunidad andaba hasta uniformado”.
El hombre que deja tres hijas huérfanas y una esposa viuda, residía en el caserío Laguna de Curumato, en la vía hacia Guarico del municipio Morán. “También se dedicaba a la agricultura con la siembra de cebollín. Es una actividad familiar que siempre hemos desarrollado”.
Aura manifestó que el lunes fue la última vez que lo vio con vida cuando lo visitó en su casa, “Me ofreció comer, andaba muy alegre, me decía que bailaramos… es que así era él siempre”, dijo la mujer que dejaba ver en su rostro las lágrimas que derramaba por el dolor que le causó la muerte de uno de los suyos, quien además, ahora debe luchar con otro de sus hermanos quien tiene una grave enfermedad.