El Obelisco, estructura que identifica a Barquisimeto desde que se cumplieron 400 años de su fundación, volvió a vestirse de luces este viernes en horas de la noche gracias a otro aporte de la Alcaldía de Iribarren en su aniversario número 461.
La noche de este viernes la alcaldesa Amalia Sáez tuvo a su cargo el encendido de la gran cantidad de lámparas que le iluminarán y harán más llamativo a visitantes y residentes.
En varias oportunidades, en años anteriores, durante fechas aniversarias de la ciudad o en temporada navideña, desde la Alcaldía de Iribarren se le ha dotado de iluminación para realzar su presencia y dar a entender que se sigue considerando su importancia como parte de la ciudad crepuscular, pero esa iluminación solamente dura algunos días al cabo de los cuales retorna la oscuridad a su alrededor.
Salvo el acondicionamiento de las áreas verdes de la redoma en la que se encuentra el icono de la capital larense, éste nunca ha recibido el tratamiento necesario al punto de que el reloj lleva años sin dar la hora y el ascensor que en un tiempo permitió el ascenso de las personas hasta la parte alta tampoco funciona.
Al menos hace algunos meses fue sometido a remoción el exterior del Obelisco con trabajos de pintura, así como también se atendieron las áreas verdes a su alrededor a las que diariamente acuden grupos familiares o de amistades a guarescerse del sol.
Con el encendido de las luces de este viernes el Obelisco se puede divisar desde lejos en horas de la noche, además de constituirse en otro atractivo de la ciudad al que, sin lugar a dudas, acudirán muchos de los turistas que nos visitan con motivo del nuevo aniversario y en los meses siguientes, porque la capital de Lara siempre ofrece razones para volver.