El papa Francisco tuvo la mejor elección para Carora al nombrar al monseñor Luis Armando Tineo Rivera, obispo de la Diócesis de los municipios Torres y Urdaneta.
Este representante en la tierra ante Dios asume hoy sábado en horas de la tarde el alto cargo religioso, justamente en la ciudad levítica, que ha entregado hombres y mujeres de bien para el servicio de la Iglesia.
La historia reciente registra que Carora es la localidad que ha ordenado más sacerdotes en Venezuela, por ello se ganó el calificativo de levítica.
Un anuncio de paz
La decisión de que Luis Armando Tineo Rivera fuera el obispo para los referidos municipios larenses estuvo a cargo del Papa, desde el momento que lo anunció al mundo desde Brasil, el martes 23 de julio de este año, durante su visita a Río de Janeiro, en medio de la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud en ese país.
Para el conocimiento del pueblo de Urdaneta y Torres, Tineo Rivera lleva 33 años ordenado como sacerdote.
Los cumplió el 26 de julio, tres días después que el papa Francisco lo escogiera como obispo de Carora.
Quien de ahora en adelante se encargará de la Curia caroreña tiene 65 años de edad, nació en Caracas el 10 de mayo de 1948.
Es un hombre llamado por Dios que realizó estudios eclesiásticos de filosofía en el Seminario San José de El Hatillo, y los de Teología en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma.
Obtuvo el título de Sociología en la Universidad Estatal de Cumaná y el de teología moral en la mencionada casa de estudios.
Posee experiencia como obispo por haber sido titular de Orreacelia y auxiliar de Caracas, desde que fue nombrado el 9 de febrero de 2007.
Sus funciones de sacerdote las comparte con la docencia. Impartió clases de teología moral en el Seminario Mayor de Caracas, donde fue director de estudios. También dirigió el Semanario La Iglesia Ahora.
Su ordenación episcopal la obtuvo el 28 de abril de 2007, hace seis años.
Júbilo católico
La alegría se desborda en las comunidades católicas de Torres y Urdaneta (Siquisique), este 14 de septiembre, con motivo de la toma de posesión del tercer obispo de la Diócesis de Carora, luego de monseñor Eduardo Herrera Riera, primer obispo de esta ciudad y fundador de la Curia, fallecido este año, y Ulises Gutiérrez, segundo obispo, cambiado hace alrededor de dos años para la Arquidiócesis de Ciudad Bolívar.
Los detalles de la preparación de esta toma los encabezó el padre Alberto Álvarez, encargado de la parte administrativa de la Curia durante dos años. La catedral San Juan Bautista contará con la asistencia del Nuncio Apostólico, obispos y cardenales invitados, el clero de Carora, familiares y amigos.
A las cuatro y media de esta tarde, está prevista la llegada y recibimiento del monseñor Tineo con caravana por la avenida Francisco de Miranda. Luego, a las cinco y media de la tarde, llegada a la sede de la Curia Diocesana y a la seis de la tarde, toma de posesión canónica como tercer obispo de Carora.
El arzobispo metropolitano de Barquisimeto, monseñor Antonio José López Castillo, presidirá los actos durante la toma de posesión, dándole la bienvenida al monseñor Tineo, en el marco de actos litúrgicos.
Allí se procederá a la lectura de la Bula Papal (pergamino manuscrito y firmado por el papa Francisco sobre su nombramiento), y posteriormente hará su respectivo saludo de presentación y sus expectativas para el pueblo católico de Torres y Urdaneta. La ceremonia será concelebrada con todos los obispos presentes y los sacerdotes de la Diócesis de Carora y de Barquisimeto.
El Clero de Carora, laicos comprometidos, movimientos de apostolados y seminaristas harán un rito de saludo y promesa de obediencia al nuevo obispo.
Mañana domingo, a las 6:00 de la tarde, el tercer obispo oficiará la primera misa en la catedral San Juan Bautista.
Con amor para todos
En amena conversación para el Diario EL IMPULSO, monseñor Tineo se definió como un servidor de corazón.
Aceptó con honor la confianza que el papa Francisco depositó en él para servirle de corazón a los torrenses y urdanetenses, “en esta gran responsabilidad de estar al frente de la Diócesis de Carora, tan querida y especial por sus características históricas, sociales y culturales; muy peculiares”.
Aseguró sentirse complacido de recibir una Diócesis en una ciudad levítica de tantos ministros que ha dado al altar durante su tradición cristiana, una de las primeras de Venezuela.
“Ha demostrado ser una tierra fecunda en sacerdotes, tanto en número como en calidad, siendo uno de ellos el obispo monseñor Salvador Montes de Oca, fiel a su conciencia y a su ministerio, quien murió fusilado por los nazis en la segunda guerra mundial, en defensa de judíos perseguidos por los nazis”, señaló.
Pero ahondó más en la historia católica de Carora y evocó al primer padre jesuita e historiador caroreño Germán González, y al monseñor Eduardo Herrera Riera, gran defensor de la feligresía.
Como un sello único, reconoció que los caroreños en cualquier parte del país y del mundo se destacan por ser personas muy religiosas; llevan en su ADN una cultura y un sentimiento religioso muy noble que forma parte de su identidad.
Gracias a su condición de servidor de Dios, monseñor Tineo afirmó que se incorpora como obispo a la capital torrense ajeno a cualquier prejuicio. “Sólo vengo a conocer, oír y servir”, junto con su gente.
Lo primero que se propone
Monseñor Tineo, con el carisma que lo caracteriza, adelantó que se propone inicialmente conocer uno por uno a los sacerdotes, párrocos, personal consagrado y los planes pastorales en marcha, así como al movimiento apostolado, seminaristas y cada parroquia que compone a la Diócesis de Torres y Urdaneta, distribuidos a todo lo largo y ancho de ese territorio. Espera culminar esta gran labor antes que finalice este año.
El contacto es importante
Las relaciones interinstitucionales están en la agenda de importancia de monseñor Tineo.
En este sentido, reveló que tendrá un estrecho acercamiento con instituciones de salud, educativas, sociales, deportivas y consejos comunales, y todo ente representativo que trabaje al servicio de la sociedad torrense y de Urdaneta.
También está dentro de sus planes mantener las mejores relaciones con la Gobernación de Lara y las alcaldías de ambos municipios.
“Extenderé la mano para buscar siempre una colaboración y contribuir como Iglesia para llevar calidad de vida a la población, fraternidad y convivencia ciudadana a las familias y los auténticos valores humanos y cristianos de los larenses”, esgrimió.
Trabajará a favor de la seguridad
Puntualizó que como Iglesia católica tiene el deber de intensificar la formación de la conciencia ciudadana, de luchar a favor de la paz, del respeto, de la dignidad y el derecho que tiene cada persona a la vida y a los bienes.
De esta manera contribuirá a bajar los grados de violencia que a su vez reduzcan en su mínima expresión el problema de inseguridad, mediante un trabajo de prevención desde la educación.
Especificó que la Iglesia tiene como misión crear las condiciones para el perfeccionamiento del ser humano en lo mejor que tiene, es decir, en la convivencia, fraternidad, amor, perdón, ayuda mutua y la felicidad de la que habló Jesús.
Somos portadores del mensaje :“No le hagas a otro lo que no quieres que te hagan a ti; trata al prójimo como te gustaría ser tratado”.
La inseguridad no la puede solucionar ni el gobierno solo ni la sociedad sola, aunque se admite que el Gobierno tiene la mayor reponsabilidad porque posee el monopolio de las armas, de las leyes, los tribunales y los cuerpos de seguridad.
En cuanto al acercamiento que pregona el Gobierno nacional hacia la Iglesia católica, monseñor opinó: “Me parece que es un deber dialogar y la Iglesia está dispuesta a hacerlo hasta lo último, siempre lo hemos hecho”.
Venezuela es una gran familia, se pueden tener diferencias, no obstante, hay que saber vivir unidos con las diferencias, respetando, y para las sanas discusiones están los consejos comunales, las asambleas de ciudadanos, los foros, la Asamblea Nacional, los Consejos Legislativos y los medios de comunicación al ejercer la libertad de expresión.
Significó la importancia respecto al acercamiento que en los últimos días ha tenido la Conferencia Episcopal Venezolana con el Gobierno nacional, al que le hizo propuestas tales como retirar el discurso agresivo, comenzar a reconocer a todos los sectores de la sociedad y apoyar las campañas positivas de desarme al pueblo civil y de los colectivos.
Es imprescindible para monseñor Tineo creer en el Todopoderoso, porque mantiene renovada la fe en los cristianos. “Si no se actualiza y experimenta la fe todo lo demás queda en el aire”.
Si no se cree en Dios, en la dignidad de la persona, en la igualdad como seres humanos, es difícil que se persuada a alguien a que se desarme, deje de insultar y atropellar.
El reto de la Iglesia es trabajar por la pacificación de los ánimos y recuperar la fe en Dios, para que el pueblo sienta que todos son hermanos.
Perfil
- Luis Armando Tineo Rivera nació en Caracas, el 10 de mayo de 1948
- Este viernes 26 de julio cumplió 33 años de su ordenación sacerdotal, la cual recibió en 1980.
- Era obispo titular de Orreacelia y auxiliar de Caracas, desde que fue nombrado el 9 de febrero de 2007.
- Realizó los estudios eclesiásticos de filosofía en el Seminario San José de El Hatillo y los de Teología en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma.
- Obtuvo el título en Sociología en la Universidad Estatal de Cumaná y el de teología moral en la mencionada universidad.
- Como sacerdote ha sido profesor de teología moral en el Seminario Mayor de Caracas y director de estudios del Seminario Mayor, así como director del Semanario La Iglesia Ahora. La ordenación episcopal la obtuvo el 28 de abril de 2007.
