Durante cuatro días se llevó a cabo en el Centro de Formación Popular Nuevo Pueblo, en El Manzano, el taller Capacitación para microempresarios, al cual asistieron 15 participantes de los estados Apure, Carabobo, Lara, Mérida, Miranda y Trujillo, provenientes de sectores económicamente menos favorecidos, quienes aprendieron a formar sus propias empresas. El programa ha contado con el patrocinio de la Embajada de Estados Unidos en Caracas y la ONG Acción Campesina. Su principal facilitador, el economista y educador Juan Casimiro, explicó:
“Llevamos más de 7 años visitando a Venezuela trabajando directamente con microempresarios, pero este año queríamos hacer un cambio para multiplicar lo que ya habíamos hecho, por medio de facilitadores. Ellos multiplicarán el concepto de “Emprede ya”, y compartirán lo que han aprendido sobre emprendimiento con diferentes microempresarios y pequeños negocios en sus propias comunidades. Esta es la meta principal. Sin embargo, como sabemos que el desarrollo personal y el crecimiento del emprendimiento no se logra sólo en cuatro días, también disponemos de una segunda fase durante la cual aquellos microempresarios que entreguen en 30 días los planes de negocios más completos, podrán ser beneficiarios de un capital semilla que Acción Campesina, Casimiro Global Foundation y la Embajada de los Estados Unidos han destinado para tal fin.
Asimismo, durante una tercera fase que se iniciará en tres o cuatro semanas, nos mantendremos conectados mediante talleres virtuales en Internet tanto para los facilitadores, como para los microempresarios, de manera que sigan aprendiendo y creciendo”.
En cuanto al tipo de microempresa más común que buscan iniciar los participantes de este taller, Casimiro señaló: “Una de los puntos que enseñamos es la importancia de identificar su pasión, lo que te gusta hacer. Luego debes hacer un inventario de tus talentos, habilidades y fortalezas, para convertirlos en tu propio negocio. Se da el caso que en diferentes comunidades hay diferentes talentos, por lo cual se observa mucha influencia de artesanía y agricultura, es decir, personas que tienen experiencia en estas áeas o incluso negocios relacionados.
No obstante, hemos visto que muchos de estos microempresarios no saben cómo llevar su negocio al siguiente nivel por falta de conocimiento de finanzas, mercadeo y tecnología, y creen que el ingreso es ganancia, pero no han puesto los costos en papel, y les hemos enseñado a cómo manejar mejor estos aspectos para que ellos mismos puedan ser exitosos. El común denominador es un negocio factible, fácil de hacer y que incluya el talento propio”.
La actividad también contó con la participación de Mary Lou Johnson Pizarro, agregada cultural de la Embajada Americana y Manuel Gómez, director de Acción Campesina.