Venezuela se retiró oficialmente este martes de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos, luego de que en 2012 el entonces presidente Hugo Chávez presentara una comunicación donde argumentaba su decisión soberana de retirarse de dicho organismo.
Con esta decisión, el país se pone de espaldas al desarrollo y avance del sistema mundial en materia de defensa de los derechos humanos al salirse de la CIDH.
Así lo expresó el diputado al parlamento latinoamericano y politólogo, Timoteo Zambrano quien explicó que con esta acción el Estado Venezolano ha roto con su tradición de haber sido a lo largo de la creación de la OEA y del Sistema Interamericano de Derechos Humanos, uno de los impulsores para crear este sistema que dio fortaleza y un ejemplo para el mundo, donde se han resuelto casos emblemáticos y le da oportunidad a los ciudadanos de a pie a tener una instancia más para denunciar las violaciones en sus respectivos países.
“No hay una razón que avale semejante torpeza del Gobierno. Hay una consecuencia inmediata: los venezolanos no tendremos una instancia para denunciar cuando el sistema de justicia no proteja los derechos. Tendremos que ir a otras instancias para poder cubrir estas carencias”.
Destacó que las denuncias ante la Corte Interamericana de los Derechos Humanos dejaban en evidencia las deficiencias en los sistemas de justicia de los Estados y a ningún Gobierno le gusta que eso ocurra.
“Estamos frente a un Gobierno que tiene una cantidad de acusaciones en materia de violación de derechos humanos y no quieren que el país continúe siento observado”.
La salida de Venezuela de la CIDH tendrá efectos negativos en la situación de los derechos fundamentales en el país.
Recordemos que la convención, apoyada en organismos como la Corte y la Comisión Americana de Derechos Humanos juega un papel crucial a la hora de promover y proteger estos derechos en toda la región además de reforzar los estándares internacionales.
Además, cabe destacar que la decisión de salida se hace efectiva un día después de que la oposición presentara ante la Comisión un pedido para calificar como fraudulentas las elecciones presidenciales de abril.