El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acompañó este sábado el ayuno y oración mundial por la paz en Siria convocado por el papa Francisco, en una jornada en la que también participó la iglesia católica venezolana.
«Hemos acompañado el ayuno y la oración mundial por La Paz con fe para detener la locura de la guerra. Nos oponemos al bombardeo contra Siria», escribió el mandatario en su cuenta en la red social Twitter.
«Nada justifica la guerra, más aún cuando sabemos que detrás de las bombas llegan las transnacionales a saquear las riquezas de los pueblos!», agregó Maduro, que hace una semana envió una carta a su par estadounidense Barack Obama para pedirle que detenga sus planes de intervención militar en Siria.
Ante miles de personas, a las 17H00 GMT comenzó la velada de oración en la plaza de San Pedro, en Roma, que se prolongará hasta las 21H00 GMT, alternando momentos de oración y de silencio, en una jornada en la que el papa estará presente y hará una breve intervención.
En Caracas, el cardenal Jorge Urosa, presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, ofició una misa de casi dos horas para sumarse al llamado del papa.
«Todo se gana con la paz, todo se pierde con la guerra. Esa es una frase que ya la han dicho varios papas y que resume un poco el pensamiento del papa Francisco frente a la posibilidad de una escalda de la guerra en Siria», comentó el prelado a la prensa tras la ceremonia.
«El Santo Padre rechaza absolutamente el uso de armas químicas en cualquier situación, pero tampoco conviene que haya una sanción armada bélica porque eso lo que puede hacer es incrementar a intensidad del conflicto», reflexionó Urosa, precisando que se harán misas similares en todo el país.
Obama pidió este sábado al Congreso estadounidense avalar un ataque militar contra Siria en respuesta al ataque químico del 21 de agosto en las afueras de Damasco, que según Washington dejó más de 1.400 muertos y del que acusa al régimen de Bashar al Asad, que niega las acusaciones.