Desde el 8 de mayo, los propietarios de la hacienda La Horqueta, ubicada en el sector Aragüita, municipio Simón Planas, están esperando que el Gobierno nacional decida sacar a los invasores y nuevamente ese predio pueda ser productivo, porque hasta ahora los ocupantes lo que han hecho es matar el ganado para comérselo, dañar las máquinas que se utilizaban en las labores agrícolas y dejar en las peores condiciones el terreno.
Esta finca es propiedad de los productores Rafael Ricardo Tamayo Sigala y Luis Gustavo Gamarra, quienes no han podido entrar a la misma desde la fecha mencionada porque quienes invadieron están fuertemente armados e incluso son temidos por los cuerpos de seguridad.
Gamarra, quien visitó la redacción de EL IMPULSO, manifestó que la ocupación se produjo a la fuerza, después de tres intentos, en el último de los cuales él resultó herido.
El día de la toma, obligaron a todos los trabajadores a desocupar el lugar bajo la amenaza de muerte si no lo hacían.
Ellos tomaron el control de toda la hacienda, de los animales y maquinaria agrícola, refirió. Para ese momento la hacienda se encontraba totalmente productiva, afirmó. El total de ganado vacuno era de 158 animales, 81 ovejos, 20 caballos y 15 cochinos. Además, se habían sembrado alrededor de 80 hectáreas de maíz y 50 hectáreas de caña de azúcar.
Hoy, según la información que tenemos es que parte del ganado vacuno, ovejos y cerdos se los han comido esos ocupantes, quienes han dañado la maquinaria y las siembras desaparecieron.
No podemos entrar a pesar de que somos los legítmos dueños, se quejó, porque tampoco los cuerpos de seguridad se atreven a meterse pues tienen temor a que los invasores les hagan disparos.
Hemos hecho denuncia a la fiscalía del Ministerio Público y la fiscal dio orden al juez agrario de hacer una investigación, pero éste no realizó ninguna acción.
También solicitamos al juez agrario que nos renovara la tutela que se había vencido, pero este proceso fue obstaculizado por los defensores agrarios que se buscaron los invasores.
Fuimos al Instituto Nacional de Tierras para que nos regularizaran la situación, pero los funcionarios sólo realizaron un inventario con todo lo que había dentro del predio para la fecha de la toma y más nada.
Hemos agotado todas las instancias y no hemos recibido respuesta, motivo por el cual insistimos públicamente a través de los medios, ya que es lamentable que en estos momentos cuando hay una escasez de alimentos, se destruya lo poco que se encuentra productivo y no haya voluntad para detener a quienes ocupan ilegalmente haciendas para destruirlas, ya que no conocen la forma del trabajo, sino la de aprovecharse de unos recursos del modo más vil que jamás habíamos visto.
Nosotros no estamos pidiendo un favor, sino un acto de justicia, porque todavía tenemos fuerza para trabajar y recuperar esta hacienda, dijo Gamarra, quien entregó fotos del predio cuando estaba productivo.
