Muchas expectativas por parte de familiares se describe en los rostros de estas personas, sobre todo madres sufridas, en las afueras del Internado Judicial de San Felipe, conocida también como La Cuarta, donde el martes se hizo presente Iris Varela, ministra de Asuntos Penitenciarios, y dio inicio al Plan Cayapa, el cual brinda atención y otorga libertades a los privados de libertad.
La tarde de este jueves un grupo de aproximadamente cien personas rodeaban el frente y los costados de la cárcel parados, otros sentados y unos acostados sobre las aceras, a la espera de las libertades de sus seres queridos prometida por Varela.
El doctor César Reyes, presidente del Circuito Penal de Lara, se reunió con ese grupo de personas en las áreas externas del recinto carcelario, y les explicó en detalle el alcance del proceso, lo cual les dio un poco de seguridad y tranquilidad.
Reyes atendió al diario El IMPULSO para informar que de los 553 detenidos en el Internado Judicial de San Felipe, todos del estado Lara, hasta este jueves se atendieron a 250.
Dijo que la referida cantidad de presos corresponde a larenses provenientes del Centro Penitenciario de la Región Centroccidental, Uribana, sacados y trasladados a la cárcel yaracuyana, cuando en enero de este año se realizó la intervención militar para depurar a Uribana.
Aclaró que las libertades otorgadas mediante el Plan Cayapa no son indiscriminadas, sino producto de un estudio técnico, que obedece al cumplimiento a las tres cuartas partes de la pena por parte del privado de libertad, observación de buena conducta, resultados favorables en el examen psico-social y dedicación al estudio y al trabajo.
Manifestó que el preso es evaluado, entrevistado y tiene derecho a la defensa “porque también en gente, ya que cualquiera puede cometer un delito”.
Todos los jueces de juicio, de control y de ejecución del estado Lara se encuentran trabajando hasta mañana sábado en colaboración con el Ministerio de Asuntos Penitenciarios, en el penal de Yaracuy, para prestarles servicios legales a los internos, determinó. Anunció que la visita para hoy en el Internado de Yaracuy de la ministra Varela.
Vivir frente a la cárcel
Desde hace más de 50 años he experimentado los horrores del Internado Judicial de San Felipe, en la Cuarta Avenida, entre calles 34 y 35, confiesa María Nadal, quien habita justo frente a la puerta de entrada del penal.
Asaltan sus recuerdos cuando los presos se infringían heridas con chuzos, “pero ahora sí es peligroso por las plomazones que se forman, casi a diario”.
Lamentó que perdió la cuenta cuando en tiempos de elecciones políticos pasan por la zona recogiendo firmas del vecindario ofreciéndoles cambiar la cárcel. “Ya estoy curada de los disparos”, comentó, sin desestimar los deseos que trasladen la cárcel a otro lugar.
