Los valores y principios en nuestra sociedad se han perdido de forma tan descarada que ni siquiera los santos templos son perdonados. La madrugada de este lunes, sujetos irrumpieron en la iglesia La Paz para robar las alcancías de las donaciones y dos manteles del altar.
A los delincuentes no les importó ingresar al templo, aprovechando la oscuridad de la noche y la soledad que reina en la zona. Las monjas de la congregación se dieron cuenta de lo que había sucedido en horas de la mañana, cuando encontraron el desastre en la iglesia y se percataron que habían ingresado por una de las ventanas que dan hacia la calle 29.
Jesús Reyes Pérez, quien se encarga de la vigilancia del templo durante el día, explicó que los delincuentes se montaron en una de las columnas y con una piqueta cortaron la tela metálica que mantenía cerrada la ventada. Por allí lograron entrar al templo a eso de la 1:00 de la mañana, revisaron todos los objetos litúrgicos y terminaron llevándose el dinero de las alcancías con las colaboraciones y dos manteles que servían para decorar el altar de Nuestra Señora de La Paz.
“Las hermanas vinieron a rezar y se encontraron todos los rastros del robo. Vieron por donde habían entrado y se alarmaron mucho. Como parte de la iglesia nos sentimos muy indignados; no respetan siquiera la casa de Dios. Desde hace 22 años nunca habíamos visto algo similar”.
“Gracias a Dios no hicieron más daños sino que sólo tomaron lo que les convenía. Todo lo demás lo dejaron intacto”.
El robo causó preocupación entre los visitantes del templo. “A la gran familia de este Santuario le ha dolido mucho este hecho, que hayan irrumpido de esta forma en la iglesia”.
Actualmente residen en este espacio ocho hermanas de la congregación Siervas del Santísimo Sacramento, quienes se encargan del mantenimiento y actividades dentro del santuario La Paz.