Twitter Foro: “El Ateneo es la expresión de Cabudare”

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El profesor Benjamín Terán destaca por su mística de servicio. Por su incuestionable papel como docente y gerente cultural, actividades que emprende día tras día con espíritu batallador.

Este barquisimetano nació el 30 de mayo de 1955 en el Barrio San José. No hubo tiempo de llegar al hospital, por lo cual su mamá, quien se llama Anastasia y es natural de Quíbor, lo trajo al mundo en su casa.

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Su papá era trujillano, trabajaba la tierra y se llamaba Rufino Antonio Terán. También fue empleado del Ministerio de Obras Públicas y barrendero de plaza.

El educador es el cuarto hijo de seis hermanos.

“Mi abuela y dos señoras más le atendieron el parto a mi mamá; ese era el tiempo de las comadronas y las parteras. Recuerdo que pequeños, esperábamos los sábados y domingos para que mi papá nos llevara a la plaza San José para ver a un señor con un mono y su caja de música”.

Terán realizó sus estudios de primaria en la Escuela Nacional Ciudad de Maturín del barrio San José, de la cual guarda significativos recuerdos de todas sus maestras. Cursó el tercer año en la escuela normal Miguel José Sanz y el bachillerato lo hizo en el Mario Briceño Iragorry.

“En bachillerato fui deportista, tenía una afición muy particular por el voleibol, el baloncesto y el fútbol. Siempre tenía la mente puesta en las canchas del liceo. Prácticamente me fugaba y me iba al Polideportivo, además trotaba desde mi casa en el barrio San José hasta el Mario Briceño Iragorry. Incursioné en el atletismo varios años. Corría los 400 metros planos”.

Recordó que en su casa no había televisor por lo cual se iba a casa de un sastre vecino para mirar desde la ventana algunos programas. Con este señor aprendió a agarrar ruedos, lo que en un futuro le sirvió para un dinero extra en la universidad.

“Mi mamá hacía conservas de coco y yo salía a venderlas. También vendíamos arepas. Teníamos que pararnos temprano para moler el maíz, de lo contrario nos daban arepas viejas para comer. Ese salir temprano a trabajar me hizo comprender que yo tenía que salir de ahí”.

Los viajes hasta Puerto Cabello en ferrocarril es otro de los recuerdos que el profesor rememoró.

“Era una alegría montarse en el tren, aunque era un viaje bastante largo, era toda una aventura asomarse por la ventanilla y encontrarse el mar”.

En medio de las limitaciones, prosiguió, tuvimos cargas de felicidad también. Los cuentos que mamá nos contaba, las canciones que nos cantaba en la cocina, los viajes en tren, pasear por la plaza, eran momentos de alegría, nos sentíamos felices.

Tránsito universitario

Terán aseguró que además de huirle a las matemáticas se fue por Humanidades por las clases de Geografía e Historia, las cuales lo hacían viajar y conectarse con los sucesos históricos. “Esa parte humanista se multiplicó y abonó. Tuve excelentes profesores en el Mario Briceño”.

En tercer año, con la anuencia de su madre, se va de la casa y trabaja como vendedor en una tienda para poder costear sus estudios.

Del Pedagógico egresó como profesor en Ciencias Sociales, mención Geografía.

Ejerció la docencia por primera vez en la Escuela Granja Héctor Rojas Meza de Cabudare. Seguidamente, pasó al Federico Carmona, donde se quedó, enamoró y casó con Eli Alba Bracho, también profesora de Geografía y directora del Ateneo de Cabudare

“Tengo más de 30 años de casado, tres hijos y tres nietos. Eli es mi novia, mi compañera, mi aliada en todo este trabajo”.

Recién casado realizó un postgrado en Administración Pública en la UCLA.
Aún es docente activo. Desde hace 22 años es profesor de Estudios Ambientales en la Universidad Yacambú.

Recorrido cultural

Su paso por el Pedagógico tuvo mucho que ver en la formación de Terán como promotor cultural. En dicha universidad fue parte de un nombrado grupo cultural, creado por los estudiantes de la sección 720. La recuperación del auditorio del recinto universitario, fue una de las primeras acciones del grupo.

En ese momento la doctora Ana Teresa de Ovalles era la directora de Cultura.

“Fui parte del orfeón, ganamos un festival aquí en el país y representamos a Venezuela en Ecuador. Me correspondía toda la parte logística e incluso tomar las instalaciones si no se daban las respuestas oportunas. El grupo logró un respeto tremendo. Era un grupo integrador, que rompió paradigmas, iba más allá de lo cultural”.

Es de mencionar que ya el profesor venía haciendo un trabajo de promoción cultural puerta por puerta mediante la Unión Cultural de los Barrios (UCB) en Barquisimeto. Paralelamente, era parte del Movimiento de la Nueva Canción Venezolana, esto en la década de los 70.

“La UCB fue una organización cultural que se desarrolló en el oeste y norte de Barquisimeto. Logramos conformar al menos 20 casas culturales con el fin de más y mejores comunidades organizadas. Trabajé en el barrio San José y allí fundé el grupo Círculo de Estudios Salvador de la Plaza. Creamos también el primer museo popular. El Ateneo de Cabudare tiene sus orígenes en ese trabajo comunitario”.

Pasos musicales

La música también tuvo su momento en la vida de Terán. Estudió en el Conservatorio Vicente Emilio Sojo y dio sus pasos en los grupos musicales Arauquín y Quibayo. “Hacíamos canciones de Violeta Parra, Atahualpa Yupanqui y cancionero venezolano. Todo en paralelo, estaba en los barrios y en el Pedagógico con las actividades”.

Terán cantó con Serrat y Mercedes Sosa en el Domo Bolivariano en el año 83.

“Todo esto debe estar en la memoria de EL IMPULSO, periódico que me ha brindado un acompañamiento de lo que he sido en estos cuarenta años como trabajador sociocomunitario, cultural, ambientalista y humanista. María Hortensia y Ángela Ameruoso tuvieron oportunidad de asistir a varios de mis conciertos como cantautor”.

El Ateneo de Cabudare

El Ateneo, dijo el educador, se funda el 21 de julio de 1990.

“Fue consecuencia del trabajo comunitario. Recién mudado a Cabudare me di cuenta que hacía falta un recinto para poner en práctica ideas y proyectos. El Ateneo se funda mediante un concurso de amigos, totalmente autónomo. Nos reuníamos en principio en la Ceiba. Luego fui a Caracas, conocí a la presidenta de la Federación de Ateneos de Venezuela para registrarlo, incluso llegamos a ser directivos de esa institución”.

Desde el Ateneo se ha impulsado el trabajo La ciudad que queremos para conocer los referentes y orígenes de Cabudare, ese estudio ha permitido hilvanar la memoria histórica, local, ambientalista y cultural.
“Hay que vertebrar todo un trabajo para dar respuestas a lo que la ciudad está pidiendo. El PDUL es fundamental en ese sentido. De alguna forma el Ateneo expresa lo que la ciudad es, para estar en sintonía con sus carencias, fortalezas y aspiraciones”.

Sostuvo que el éxito del Ateneo radica en esa autonomía que permanece por encima de cualquier limitación o dificultad. La coherencia del equipo de trabajo también ha sido clave.

“Contamos con recursos de la Gobernación del estado Lara, la Alcaldía de Palavecino aporta para los gastos operativos. El Gobierno me ha dicho que para darme financiamiento debo retirar los logos de la Gobernación, pero resulta que no es un asunto de logos, sino de que todos luchemos por el mismo objetivo. La alianzas, no comprometen la autonomía ni la programación”. El Estado, añadió, debe entender la responsabilidad financiera que tiene con las instituciones culturales; un compromiso consagrado en la Constitución.

Se conoció que el Ministerio para la Cultura tiene una gran deuda con el Ateneo de Cabudare.

“El Estado no ha cumplido con un mandato constitucional, caso Ateneo de Cabudare, no recibimos ningún financimiento del Ministerio para la Cultura; eso es una deuda de años. Ahora le estamos solicitando los aportes para la realización del Salón Héctor Rojas Meza, a Iartes, principalmente, ya que todo está centralizado. Esperamos igualmente el aporte de Pdvsa La Estancia, tenemos que acompañarmos sin ese protagonismo individualista”.
Reiteró que el comportamiento del país, en sus planos económico, político y social, también se refleja en la parte cultural. Ese país no encontrado, dividido, que se debate en dos líneas, se encuentra en el plano cultural artístico.

Como institución, dijo, hemos entendido el trabajo que asumimos, no avanzaríamos sin un buen equipo de trabajo y los diversos aliados. “Las ganancias del Ateneo son consecuencia de un trabajo de mucha mística, entrega, una verdadera misión, sin esperar nada a cambio, sino impactar positivamente en la ciudad. El proyecto nuestro es trascender”. Expresó que al Ateneo no le van decretar su manera de ser ni de trabajar, tampoco la vida ni la esperanza.

“Todos los creadores y promotores tienen que mirar en función del país que queremos. Es un compromiso que tenemos con el país, no se trata ni de cuartas o quintas repúblicas, sino de un país donde podamos desarrollarnos. El crecimiento de un país se mide por su desarrollo cultural”.

Ley Orgánica de Cultura

La cultura, explicó el educador, no se puede regular, al contrario, el Estado tiene que promover, de acuerdo a un mandato constitucional creado por los propios constituyentes.

“No es imponer de manera obligada un modelo político, un proyecto político por encima de los intereses y necesidades colectivas. Esas leyes secuestran la capacidad, limitan la amplia capacidad de movilidad y de creatividad, de todos los creadores e instituciones. Encerrar eso en una propuesta político-partidista que responda a un interés en particular no tiene razón de ser, a menos de que sea el acompañamiento a un proyecto político de Estado, que en eso el Gobierno ha sido exitoso”.

Terán mencionó que en el año 2002 lo nombraron Patrimonio Cultural Viviente de la Nación y a pesar de ello, ni el Ateneo ni su persona, reciben algo al respecto.

“Nuestros viejos acervos se encuentran en terribles condiciones. Por eso la Ley de Cultura debe mirar hacia dentro y conocer la situación en la que se encuentran los trabajadores culturales y las instituciones hoy día.

Tiene que ser una Ley de innovación, que promueva y permita la diversidad ya que no respondemos a un solo criterio. Las artes no se pueden regular, imponer, obligar. Quienes aprueben la Ley sentirán las consecuencias de la misma más adelante. De aprobarse la Ley lo que se nos viene encima es fuerte”.

Twitter Foro

El profesor Benjamín Terán respondió a las preguntas que a través de nuestro twitter @elimpulsocom hicieron nuestros lectores. Esto contestó:

@RaulEMendoza ¿Qué talleres e iniciativas en cuanto a la actuación se están efectuando en el Ateneo?
R: La verdad hemos estado más enfocados en lo que respecta a las artes plásticas y a la música. Sobre actuación hemos ofrecido talleres temporales y esperamos en el futuro contar con un mejor espacio físico para desarrollar esa área
@Jgregrodriguez ¿Dónde podemos conocer las actividades del Ateneo en la web?
R: Quién quiera saber de nosotros nos puede buscar en la página de EL IMPULSO que siempre cubre nuestros eventos. También contamos con nuestra páginas de Facebook que es Ateneo de Cabudare y nuestro twitter @AteneoCabudar
MCG

 

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