Cuando su padre, el legendario Vicente Fernández, aprobó el resultado plasmado en «Confidencias», Alejandro Fernández supo que había logrado el mejor álbum de su carrera.
A finales de 2012, «Chente» se preparaba para una cirugía en la que le extirparían un quiste en el hígado cuando Alejandro Fernández le mostró las 14 canciones que dan vida a su nueva producción discográfica, en la que destaca «Me olvidé de vivir», el tema para el que la leyenda de la música popular mexicana unió voz con el menor de sus hijos.
«Mi papá es un hueso muy duro de roer, y justo antes de que entrara a la sala de cirugía le mostré este álbum. Me lo acababan de entregar y quise enseñárselo. Honestamente, hay discos que he preferido no mostrarle; sin embargo, esta vez sentí que era un momento especial», contó «El Potrillo» el lunes durante una conferencia de prensa en el Museo José Luis Cuevas en la que presentó «Confidencias».
«Cuando mi padre terminó de escuchar el disco, me abrazó y me besó. Me dijo: `íFelicidades, es el mejor disco que te he escuchado!»’, recordó Alejandro Fernández, quien enfatizó que considera a su progenitor su mejor juez, a pesar de que el legendario cantante declaró en alguna ocasión que prefería a su hijo en su faceta como intérprete de música ranchera que como baladista.
En «Confidencias», su primer disco en casi cuatro años, Fernández recopiló nuevas versiones de algunas baladas del cancionero popular iberoamericano que le acompañaron durante su niñez, proyecto en el que además de su padre, participaron la cantante estadounidense Christina Aguilera y el británico Rod Stewart.
El álbum, su segunda producción bajo el sello Universal Music y realizada por el fallecido estadounidense Phil Ramone, reúne canciones como «Te quiero, te quiero», «A pesar de todo», «Cóncavo y convexo», «Olvidarte», «Apagó la luz», «Procuro olvidarte» y «Porque te vas», de la autoría de los brasileños Roberto Carlos, Nelson Ned y Denise De Kalaf, y los españoles Manuel Alejandro y José Luis Perales.
Con Stewart y Aguilera, Fernández grabó «Nobody knows when you’re down and out» y «Hoy tengo ganas de ti», respectivamente. Esta última pieza fue el primer sencillo de «Confidencias», y a unas semanas de su estreno, ya le mereció un disco de platino y uno de oro al registrar más de 100.000 descargas en plataformas digitales como iTunes.
«Grabar temas con este peso y de esta magnitud es mucho más difícil de lo que creíamos… Nos concentramos muchísimo, creo que nos protegimos muy bien y tratamos de hacerlo dignamente», dijo el cantante jalisciense, cuya carrera musical comenzó hace dos décadas.
Visiblemente emocionado, Fernández dijo que, a sus 42 años, vive una etapa plena a nivel personal y artístico, con grandes retos y muchos sueños que cumplir. «Me siento feliz, todo llega en su momento, a su tiempo… Cada vez que me propongo una meta, trato de cumplirla, me gusta arriesgar siempre», manifestó.
Destacó que la familia ha jugado un papel primordial en su desarrollo profesional y personal, y consideró que en ese largo proceso, su padre ha sido una pieza clave. «Él (su papá) siempre estuvo detrás de mí mientras aprendía a abrir las alas y a volar por mí mismo, lo único que hizo fue cuidarme», dijo.
Fernández descartó que quiera ocupar el lugar de su padre, luego de que «El Charro de Huentitán» anunciara a principios de 2012 su retiro de los escenarios, después de cuatro décadas de carrera ininterrumpidas para dedicarle mayor tiempo a su familia.
«¿A quién no le gustaría ocupar el lugar de mi padre? Contrario a lo que se menciona, jamás ha habido rivalidad con mi padre, al contrario, él ha sido mi guía y me siento honrado de ser el hijo de una de las figuras más reconocidas de la música popular mexicana», dijo el ganador del Latin Grammy.
Alejandro Fernández anunció que su gira «Confidencias World Tour» iniciará el 6 de septiembre en su natal Guadalajara, para luego viajar a otras ciudades de México, Estados Unidos, España, y Centro y Sudamérica.