Los artículos 19, 20 y 21 de la actual Constitución nacional, son muy específicos en cuanto a los derechos humanos estableciendo, que no se permitirán discriminaciones de ningún tipo y que el Estado garantizará que esto se cumpla. La Homofobia es el rechazo a la homosexualidad y, en nuestro país, se transmiten varios programas de televisión y se redactan canciones en las que se trata el tema de los homosexuales de manera chistosa, pero nunca había ocurrido algo tan bochornoso como lo que presenciamos hace unos días en la Asamblea Nacional, en donde se pudo demostrar que ese diputado si sufre de homofobia. Por lo tanto, ese personaje debería ser inhabilitado y puesto a la orden del poder judicial ya que violó los artículos citados anteriormente.
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Homofobia, política, cristianismo y las posturas hipócritas
A partir de las fundamentadas denuncias que se presentaron ante el parlamento nacional venezolano, en contra de un partido de la ultraderecha que se hace llamar Primero Justicia, se ha desatado toda una campaña de intrigas, falsas posturas y un rubor que nadie había visto en este país y, en especial, se nos ha acusado de practicar la homofobia. Por cierto que, la jerarquía católica, muy dada a opinar sobre la política, no han dicho esta boca es mía, cuando tienen mucho que decir, no solo a la feligresía, sino a la opinión nacional e internacional.
Hay quienes del lado de la ultraderecha han pegado el grito al cielo y amenazan con ir a la instancias internacionales de DDHH, cosa que no es nueva para nosotros, cuando se descubren sus veleidades, ocurrió a propósito de los fatídicos hechos acaecidos en Venezuela durante los días 11, 12, y 13 de abril, donde fuerzas fascistas persiguieron, allanaron y asesinaron a dirigentes del chavismo, por su preferencia política y donde el partido Primero Justicia, jugó un rol preponderante en la redacción del decreto de Carmona, la detención arbitraria de dirigentes del chavismo, sin que mediara formula de juicio. Hasta el Ministro de Finanzas del gobierno de facto tenían listo, se llama Leopoldo Martínez. En esos días no vi a ningún dirigente justiciero reclamando justicia ni abogando por los DDHH, de hecho la flamante e impoluta actual jefa de fracción, comandó los allanamientos a las oficinas de Freddy Bernal. La plana mayor de PJ, horas antes leyó un comunicado, que al compararlo con el decreto de Carmona, son una copia fiel y exacta, es decir, hay razones objetivas para pensar que participaron en la redacción del mismo, no los vimos horrorizados por la disolución del parlamento de un solo plumazo.
Si hablamos de DDHH, es con la Constitución del año 99, propuesta por Chávez y aprobada en referéndum popular, que se hace una Constitución que garantiza los DDHH en este país, se prohíbe la discriminación y se incorporan derechos jamás consagrados en texto constitucional alguno en Venezuela. Nunca se han suspendido las garantías constitucionales y hoy como nunca ha nacido toda una institucionalidad que supervisa el cumplimiento de estos derechos. Se ha construido un entramado de leyes que desarrollan derechos para todos por igual y que protegen a los más desvalidos. ¿Dónde estaban los justicieros cuando se propuso esta Constitución? Bueno, impulsando su no aprobación; esta es la primera acción farisea de los dirigentes de PJ.
Nadie que evalúe objetivamente puede acusar a las fuerzas patriotas de homofobia, pues como minoría que son, tienen garantizados sus derechos y participan en todos los ámbitos de la nación, gracias a la revolución bolivariana y no son los forajidos de PJ, quienes nos van acusar de nada a quienes no hemos olvidado, su participación en un golpe de Estado y en el criminal sabotaje petrolero, que costó vidas y perdidas económicas a Venezuela.
¿Por qué, en lugar de utilizar el burladero de la homofobia, no responden a las contundentes pruebas presentadas contra su dirigencia? ¿Por qué esconden al principal señalado? ¿Por qué lo ponen a buen «resguardo»? ¿De quién lo resguardan? ¿Será de ustedes mismos?
¿Por qué no pegaron el grito al cielo y salieron a pedir celeridad en las investigaciones, a propósito de los asesinados en los días de abril de este año, cuando el capo mayor de PJ salió y mandó a descargar la «arrechera» a sus seguidores y aún no dan siquiera el pésame a los familiares y deudos de estos venezolanos, que su delito fue apoyar a la revolución bolivariana?
¿Quiénes son los homofóbicos, los que les respetan o quienes los ocultan para utilizarlos con fines perversos en nombre de la vida privada?
Mención especial merece la jerarquía eclesiástica, ante su silencio, pues ellos también tienen mucho que decir al respecto. Pues una cosa son los DDHH de los gay y otra, muy distinta, es el lobby de estos, para imponer su preferencia.
Aquí lo que se ha denunciado es la corrupción ética, moral y financiera de una parte de la dirigencia de PJ, hay evidencias que así lo demuestran, cheques, transferencias, correos cruzados con un enlace del Departamento de Estado de los EEUU cuadrando el manejo de dos millones de dólares, para Capriles TV y la propaganda negra, que involucra al nefasto Roger Noriega.
No huyan el debate, asuman responsablemente los contundentes señalamientos y no utilicen a las minorías de este país, para acusarnos de lo que no hemos hecho y que, por el contrario, la historia, las pruebas y sus acciones les incriminan con delitos y otras practicas similares.
Esperamos por el aporte de la jerarquía católica a este debate, sin manipulaciones, sin chantajes, pues la Biblia establece los códigos éticos para los que están en eminencia y ordena pastorear a la grey. Les recomiendo leer las epístolas de Timoteo, Romanos, primera y segunda de Corintios, escritas por el apóstol Pablo y las causas de la caída de Sodoma y Gomorra, para ver si coinciden con la MUD y sus fariseos. Por cierto, secta muy parecida a la dirigencia de PJ, muy dada hablar una cosa y hacer otra.
El presidente Maduro ha solicitado una ley habilitante para luchar a fondo contra la corrupción y lo vamos apoyar. ¿Qué dice PJ? Bueno apela al chantaje contra quienes en la fuerzas opositoras se atrevan apoyar esta medida en la AN, incluso los juzga a priori, acusándolos de corruptos, ¿Qué esconden? ¿Qué tapan? ¿Las pocas voces disidentes de la MUD van a permitir que PJ los acorrale y los haga pasar a la historia como acompañantes de su farsa?
Las cartas están echadas y es una batalla entre quienes pujamos por un país libre de corruptelas o quienes en nombre de falsos argumentos escurren el bulto. Sin chantaje y sin hipocresía, vamos al debate y al combate. Hago estas pequeñas reflexiones, antes de que la canalla mediática me fusile.
José Ávila
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Cada quien con sus preferencias
Somos dueños de nuestras vidas, de pensar y actuar de manera libre, siempre y cuando no cause daño contra la integridad física o moral de otros. La discriminación no es la salida para cualquier circunstancia, ¡no apoyo la discriminación sexual!
Freddy Márquez
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Homofobia Roja
Claro que este gobierno es no sólo es homofóbico, también es sectarista, clasista, divisionista y racista. Todos somos testigos de cómo, voceros del régimen, usan calificativos despectivos en contra de las personas que tienen preferencia por su mismo sexo, colocando en el escarnio público a seres humanos, solo por pensar diferente o por ser ricos o por ser homosexuales. De manera que, ahora, los funcionarios del régimen quieren remendar el capote recogiendo sus palabras cuando ya son del dominio público y a los ciudadanos ya no nos queda duda de que estamos frente a un sistema de gobierno lleno de complejos y prejuicios, en contra de venezolanos que no comulgan con su manera de pensar o de actuar.
Las sociedades modernas avanzan a un ritmo acelerado hacia su emancipación, y por este motivo necesitan ser regidos por gobiernos emancipados, es decir, sus gobernantes deben tener mente amplia para poder asimilar todos los cambios que se avecinan. Por supuesto, el tema de la homosexualidad y del racismo ya deberían haber sido superados, pues los mismos deben ser tratados con naturalidad y sin hipocresía, porque quienes piensan diferente o tienen preferencias distintas son seres igual que los demás, con sus mismos deberes y derechos, y deben ser estimulados para ser integrados de lleno a la sociedad.
De manera que la homofobia roja es otro de los grandes defectos de este gobierno, porque, además, cuando los voceros del régimen se expresan lo hacen con saña, malicia y con un vocabulario soez. Se puede sentir cómo, por todos sus poros, brota la rabia y el desprecio por quienes son diferentes a ellos, eso hace que uno sienta pena ajena por unos funcionarios que se expresan tan mal de sus semejantes, cuando uno lo que espera es que los funcionarios que están en el gobierno se conduzcan con respeto y decoro para que los ciudadanos nos sintamos bien representados.
Creo que este es un motivo más para que nosotros los gobernados, sobretodo los que todavía sienten afecto por este régimen, comiencen a reflexionar y a decepcionarse de tan malos representantes públicos que no están cumpliendo con su papel a cabalidad.
De tal modo que, el camino se despeja cada día más, quiero creer que los ciudadanos de este país, cada vez más, toman conciencia de que merecemos ser gobernados por gobernantes respetuoso del lenguaje y de las personas, no hay derecho a que los ciudadanos de esta nación sigamos siendo segregados precisamente en este momento que necesitamos paz, unión y progreso.
Alirio Palencia
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Gobierno homofóbico
Corrupto, incompetente, intolerante, injusto, despilfarrador, arrogante, ineficiente, torpe, inculto, represivo, ilegítimo… A todas estas posturas y calificativos del Estado venezolano y sus poderes, se le suma ahora otra triste forma de persecución: la homofobia.
No les basta con la lista Tascón (aún vivita y coleando). No les basta con coaccionar a miles de venezolanos obligándolos con el voto inducido, no les basta con el apartheid político o con inhabilitar a candidatos que no son adeptos a su proceso, evidentemente no. Ahora, a quienes pensamos distinto al Gobierno no solo se nos tildará de fascistas, derechistas, burgueses, sino también de “maricones”. Un calificativo más para dividirnos.
El pasado martes 13, el perturbado y desmedido Pedro Carreño, expresó casi a nivel de convulsión satánica en el seno de la Asamblea Nacional, un deslenguado discurso contra Henrique Capriles, donde lo calificó de “maricón” e hizo otros ensañamientos escatológicos.
“Responde, homosexual (….), acepta el reto maricón”, gritó al calor de la discusión el diputado chavista Pedro Carreño, refiriéndose al Gobernador de Miranda y quien a su vez ha acusado al legislador de corrupción.
A Carreño, próspero negociante de la política, sencillamente se le «chispoteó» como al Chavo del 8 lo que realmente piensa de las personas de sexo diverso. Dejo bien clara su opinión homofóbica, aunque tratase de enmendar el error horas más tarde debido a la repercusión negativa de sus palabras en la opinión pública nacional.
Así es él y así es la mayoría de los revolucionarios (a excepción de algunos de muy conocida preferencia sexual que militan en el PSUV) que al peor estilo cubanistoide persiguen a quien piense diferente con prejuicios que en el contexto mundial están siendo observados y juzgados por instituciones como Amnistía Internacional, organización que tiene en la mira a más de 70 países que en el mundo practican la homofobia.
Para el director de la consultora Datanálisis, Luis Vicente León, estos ataques son parte de la “radicalización” a la que apuesta el gobierno, ¡Estoy de acuerdo!
Nosotros, desde Voluntad Popular, hemos defendido el derecho a la diversidad sexual y a cualquier discriminación contra el ser humano. Hemos mantenido una lucha firme en eso.
Para lo que si seremos siempre intolerantes y radicales es para la lucha contra los corruptos de esta boliburgesía que no pueden justificar sus exóticos ‘fiestones’, paradisiacos paseos, corbatas «Louis Vuitton”, calzados Gucci, fortunas y bienes en “El Imperio” y pare usted de contar…
Lester Toledo
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Homofobia
La homofobia es, básicamente, el miedo a la homosexualidad. Pero este miedo viene del desconocimiento, de no saber cómo enfrentar o cómo tratar a quienes son diferentes, a quienes son homosexuales. Y es que tanto la homosexualidad como el miedo a ella misma ha existido siempre.
No sabemos, o no entendemos en muchos casos por qué ocurre, por qué le paso a un conocido, a un familiar o a un hijo o pariente muy cercano, y somos capaces de emitir opiniones descabelladas del por qué haya ocurrido de tal o cual manera, lo cierto es que la manejamos con desprecio, con temor y, a veces, con violencia. Siendo así, nos enfrentamos como sociedad al detrimento de los valores. Quiere decir, entonces, que como sociedad le tenemos miedo a lo desconocido, pero también somos intolerantes a lo que es diferente.
Por lo tanto, quienes son diferentes y tienen preferencias sexuales distintas a las nuestras, se enfrentan a un futuro incierto, sufren en silencio, se ocultan, son la burla y en determinadas culturas como la India, este tipo de “conducta” hasta hace poco fue considerada delito. En otros países como Siria y Arabia Saudita, ser diferente en este sentido puede significar la muerte. Sin embargo, el aceptar que una persona tiene una preferencia sexual distinta a quienes se consideran “normales” es de difícil comprensión, por cuanto se nos ha enseñado siempre que es contra las leyes de Dios el sexo entre personas de un mismo sexo.
Contradictorio, si por un momento examinamos el mundo a nuestro alrededor, un mundo globalizado, jactancioso de tanto adelanto tecnológico, pero que dejó atrás los sentimientos del otro. Es extraño ver cómo en la televisión se pueden ver escenas de violencia relacionadas con la guerra, o en los videojuegos como los niños se divierten jugando a “cuántos puedo matar”, sin embargo, como sociedad, como familia, es importante que seamos capaces de transmitir valores, básicamente el de la tolerancia.
La homofobia está presente en la cotidianidad, en nuestro entorno. Siempre hay alguien diferente, o “amanerado”, ese que es señalado, que se convierte en la comidilla de muchos, de aquellos que tienen una pobre y angosta cosmovisión del mundo y es visto con burla. No quiere decir que seamos una piltrafa de sociedad, pero en definitiva pareciera que no atendemos este tipo de situaciones debidamente o quizás, estamos muy preocupados buscando los artículos de primera necesidad y simplemente no nos interesa opinar al respecto porque es problema del otro.
No se puede andar por el mundo causando sufrimiento a quienes son diferentes, porque son homosexuales, por el contrario, hay que fomentar la tolerancia y el respeto por las opiniones ajenas. No quiere decir entonces que debamos vivir en una sociedad como Sodoma y Gomorra, no se trata de ver a jóvenes vendiendo su cuerpo en la calle a personas de su mismo sexo, porque entonces también estaríamos en presencia de prostitución además de la homosexualidad, no se trata de crear un mundo sub-realista donde estén a la orden del día todo tipo de prácticas y vicios aberrantes para que quien sea diferente se sienta aceptado, ¡no!, se trata de establecer límites donde exista el respeto, la tolerancia y el amor.
Maritza Rojas Bracho
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Próximo Tema:
Eficiencia en empresas públicas:
Caso Lácteos Los Ándes
Luego de que, el alto poder venezolano, anunciara una lucha contra la corrupción, y en vista de los señalamientos de algunos trabajadores de empresas públicas como Lácteos Los Ándes, deseamos conocer, ¿qué opina usted de la corrupción en las empresas públicas? ¿Existe? ¿Será investigada? ¿Se castigarán todos los casos por igual?
Envíenos su opinión a [email protected] antes del viernes 30 de agosto y será publicado el 2 de septiembre en la página 2 del cuerpo A, en la Página de los Lectores.
