Familiares de Carlos Luis Jiménez Herice, de 19 años, quien fue asesinado la mañana del martes en la carrera tres de Barrio Unión, junto a José Yoslen Lara Márquez, de 25 años, informaron que el joven no había estado detenido nunca antes ni estuvo involucrado en hechos delictivos.
Carmen Ramos, tía de “Catire”, como le decían cariñosamente a Jiménez Herice, dijo que “él no era ningún delincuente, trabajaba desde hace tres años en la calle 10 con avenida Venezuela, instalando papel ahumado en los vidrios de los carros”.
Aseguraron no saber lo que sucedió la mañana del martes, pues “hay varias versiones. Lo cierto es que nada de lo que salió ayer en los medios es cierto. No tenía problemas con nadie, era buen muchacho (…) la moto que cargaba era de él y la compró con el esfuerzo de su trabajo, donde además hacía ‘carreritas’ en su tiempo libre”, comentó la dama, quien estaba notablemente afectada por el fallecimiento de su pariente.
“Él llegó el sábado en su moto de Caracas donde trabajó un tiempo conmigo en Miraflores”, aseveró su padre José Luis Jiménez, quien manifestó laborar en el área de servicios generales de la casa presidencial. “Yo tengo años ahí y me lo llevé un mes para que colaborara”.
El triste padre explicó que al parecer los iban persiguiendo y que incluso el arma de fuego encontrada en la escena del crimen quedó cerca de Lara Márquez, “quien era sano, ni siquiera ingería bebidas alcohólicas, más bien me regañaba cuando yo lo hacía”.
El hoy occiso, vivía en el barrio La Cañada junto a su madre, pero a su vez, tenía una hija de dos años de edad, a quien según ellos, mantenía económicamente y velaba por su bienestar.
Recordaron que el día del suceso, estuvo en la mañana en su residencia, luego fue a hacer un transporte a Barrio Unión y luego se dirigiría a su trabajo habitual. “El otro fallecido era conocido de él, pero no eran amigos”.
“Catire”, el mayor de tres hermanos, pertenecía a una familia cristiana evangélica y aunque él no pertenecía a la religión sí iba en ocasiones a escuchar la palabra del Señor. Sus familiares esperan que se investigue el caso y no quede impune como otros en el país.
