Por la puerta del sol – Fascinante mitología (III)

Dotada del vigor del genio de la visión, la escritora J.K. Rowling llegó más lejos de lo que aspiraba, tuvo el coraje de hacer lo que su intuición y corazón le dictaron, se elevó por encima de sus sueños, logró revivir el alma de la Mitología, desempolvó la vestimenta de los magos, expuso el poder de la inteligencia, lo macabro de la envidia, los vuelos del alma. Logró penetrar el espíritu de los niños, los puso a pensar y a comprender el verdadero carácter de las leyendas divinas de la antigüedad, a crear sus propias magias, crecer, analizar los acontecimientos y comportamientos del hombre frente a su similar, disfrutar lo fantástico que guardan los libros y lo lejos que se puede llegar cuando se quiere. Su poderosa imaginación recuerda  aquella famosa frase de Mozart que dice así: “Ni la inteligencia sublime, ni una gran imaginación, ni las dos cosas juntas forman el genio; amor y solo amor puesto en lo que se hace, eso es el alma del genio”. J. K. eligió convertirse en la fuerza creativa de su vida; hoy su fama se extiende, su huerto está lleno de laureles, refulge su estrella, gana seguidores, avanza, invita el mundo a no perderse en el camino de los sueños.
Grecia tiene en su raíz, en su saber, en sus luchas, sabiduría y experiencias algo que nadie puede envidiarle: su antigüedad. Allí nació el pensamiento y los primeros pensadores, su filosofía nos ilumina, sus fuentes nos enriquecen, se vigorizaron las ideas, allí se analizaron las virtudes y defectos del hombre, nació el teatro, la fábula, el arte, su antigua lengua enriqueció la nuestra.
Los grandes interesados han acudido a la fuente de los clásicos, a los papiros, inscripciones y monedas. Si observamos bien en todos los mitos subyace una serie de rasgos comunes.
En las obras de Homero y Hesiodo se encuentran leyendas completas de los primeros mitos, igualmente de los orígenes del mundo, de los dioses, de las tragedias humanas y de las costumbres.
En la amplia variedad de mitos y leyendas que forman la Mitología, las deidades se describen esencialmente humanas pero con cuerpos  perfectos. Cada dios provenía de su propia ascendencia, se les consideraba inmunes a las enfermedades, sempiterna su permanencia.
Según la teoría de la escritura todas las leyendas mitológicas proceden del relato de los textos sagrados, aunque los hechos reales hayan sido disfrazados, alterados e interpretados por quienes se encargaron de traducirlos y enseñarlos al mundo.
La conquista de las ciudades fue el comienzo de los cambios culturales más importantes de la historia. A través del esfuerzo y mezcla de culturas el genio helénico  logró ampliar su campo de operaciones. Acontecimientos, guerras, luchas, las mejoras, los héroes, es el periodo en que se desenvolvió el genio griego. A la civilización helénica se debe la mayor parte de las innovaciones políticas y culturales, raíces de la sociedad actual.
Como el cocuyo el genio que hay en J. K. Rowling  despliega su fanal, nos hechiza; seguimos inmersos en la búsqueda de secretos y misterios del ayer.
Zeus permanece en la cumbre del Olimpo, poderoso, grande, continuamos  pendientes de las murallas guardadoras del fuego perdido del dragón, Eco sigue siendo la ninfa favorita de Artemisa quien a la vez desde el umbral del cielo sigue alimentando en las noches los abrazos y los sueños,  todavía  vuelan en bandadas los cisnes del lago de Apolo, ya no hay pajarracos en el Estínfalo,  Urano sigue poniendo orden en las estrellas, Tifón alimentando tempestades, Ares creando tornados, Neptuno alimentando cóleras y odios políticos, todavía no se cansa Atenea de alumbrar el pensamiento, Venus no cesa de arrojar Helenas en los brazos apasionados de un Paris, ni las flechas de Cupido de llegar al corazón, Temis no personifica la justicia en momentos de dictadura, las musas siguen alumbrando la memoria de los seres, Erato continúa haciendo poesías, los Heracles luchando por la verdad.
Gracias a la mitología se determinó la historia. La ciencia no ha podido apartar los mitos, continúan siendo irreductibles.
Si confiamos en nosotros y contamos con el poder de ir a donde nos lleve la infinita imaginación, podremos llegar al mismo cielo. Imaginación y fe son manos que se ofrecen para ayudarnos a volar libres hacia el paraíso soñado.
“El mundo está lleno de maravillas, pero nada es tan maravillosos como el mismo hombre” (Sófocles)
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