La producción del sector manufacturero venezolano siguió su declinación para el segundo trimestre de este año, de acuerdo con los resultados de la encuesta de coyuntura dada a conocer este jueves, en conferencia de prensa, por el presidente de la Confederación de Industriales de Venezuela (Conindustria), Eduardo Garmendia.
Conindustria responsabiliza de esta situación, a las políticas económicas erradas del Gobierno, que siguen siendo un obstáculo para la recuperación del sector industrial venezolano, lo que se evidencia al analizar los resultados de la encuesta de coyuntura correspondiente al II trimestre de 2013 que apuntan a una disminución de la producción, ventas e inventarios de las empresas.
Admite que en la mayoría de los casos, esta reducción de la actividad industrial está relacionada con la falta de materias primas para operar, como consecuencia a su vez del retraso en la asignación de divisas para importar, situación que ha sido denunciada en reiteradas oportunidades por Conindustria.
Ratifica Garmendia que la encuesta ratifica las cifras del BCV, en cuanto a una caída de -1,7% en el primer trimestre, en tanto que los encuestados estiman que no habrá crecimiento en el segundo trimestre, o si lo hay será insuficiente.
En tal sentido, señalan que la mayoría de los consultados considera que la situación del sector y de su empresa en el período abril-junio del presente año es mala o regular. Lo mismo sucede con las expectativas para el tercer lapso de 2013. En cuanto a las ventas, sólo en los sectores minerales no metálicos y vidrio y en el de alimentos, bebidas y tabaco hay más empresas que reportan aumentos que las que señalan caída; por el contrario, en químicos; madera y muebles; productos metálicos; textiles, confección, cuero y calzado; papel y cartón y metálicas básicas hay más repuestas negativas que positivas.
Al referirse a la producción, únicamente el sector de minerales no metálicos muestra un saldo positivo. Todo esto influye en que un mayor porcentaje de las empresas encuestadas afirma que no invertirá en lo que resta de año. De hecho, 65% de la gran industria, 45% de la mediana y 42% de la pequeña asegura que realizará solo inversiones operativas; mientras que 28% de la grande, 12% de la mediana y 5% de la pequeña empresa dicen que harán inversiones mayores y 25% de la grande, 38% de la mediana y 48% de la pequeña advierten que no invertirán.
Con respecto a los factores que impiden aumentar la producción, destacan la incertidumbre política que se mantiene en el primer lugar, seguida por la falta de divisas y materias primas. La primera causa tiene que ver, sin duda, con la política de expropiaciones y ataques a la propiedad privada que ha arreciado en los últimos meses.
Las dos últimas están vinculadas con la política de control de cambios que obliga a las empresas a solicitar autorización para adquirir divisas para importar materias primas, repuestos y maquinarias y equipos.
Garmendia insistió que persisten las demoras en las aprobaciones y liquidaciones de divisas en Cadivi, cuyo retraso se ubica en promedio en 189 días; en tanto que el Sicad tampoco ha funcionado en las condiciones óptimas ni está entregando con celeridad los montos aprobados a las empresas, ratificando que el mecanismo alternativo no es el método para resolver los problemas de divisas del sector manufacturero.
Se refirió asimismo, a la nueva arremetida del Gobierno en contra de la propiedad privada, destacando las últimas empresas estatizadas como Sílices de Venezuela, Calcior y la ensambladora Great Wall; más la aprobación de nuevas leyes que obstaculizan el desarrollo del aparato productivo nacional.