El servicio de emergencia más concurrido del estado Lara se encuentra en el Hospital Central Universitario Antonio María Pineda (Hcuamp), con un promedio de atención diario de 385 a 500 pacientes.
Víctimas de la violencia y de accidentes de tránsito son las emergencias más críticas que deben ser atendidas por médicos y enfermeras dedicados a trabajar en estas áreas.
La vida de estas personas depende de una atención rápida y efectiva, porque sólo minutos pueden transcurrir entre el respirar y expirar de alguien en condiciones graves.
Por esta misma razón, la población debe conocer cuándo realmente debe acudir a un servicio de emergencia, sea público o privado, puesto que un simple dolor de cabeza o toma de tensión puede entorpecer el verdadero trabajo de salvar vidas.
“A veces las personas se quejan porque van a tomarse la tensión y les decimos que no lo haremos, porque nuestra emergencia no se encarga de eso. Después dicen que en el Hospital no los atendimos, pero la realidad es que no acudieron porque su vida estuviese en peligro”, precisó Ruy Medina, en la actualidad director del Hcuamp, cuya emergencia lleva su nombre en vista de las cuatro décadas de servicio en dicha área.
“Consideramos incluso una falta de respeto que vayan a la emergencia del Hospital para el control de la tensión arterial, porque esto debe realizarse en la red ambulatoria de primer nivel”, señaló René Rivas, quien es médico adjunto a la emergencia del Hospital Central, docente del posgrado de medicina de emergencia y desastres de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA) y coordinador de urgencias del Hospital Internacional de Barquisimeto.
Mencionó que otro caso común que observan en el Antonio María Pineda es la concurrencia de pacientes con patologías menores, pero que requieren un reposo médico para convalidarlo en el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS).
“Un médico de cualquier ambulatorio está capacitado y tiene la autoridad para dar un reposo médico si lo considera necesario para el paciente, no tienen que venir al Hospital Central”, destacó René Rivas.
Canales de atención
René Rivas explicó que dentro del servicio de emergencia realizan lo que denominan “triaje”, donde establecen las prioridades de atención hospitalaria después de la inspección e interrogatorio al paciente.
“Lo ideal es que para los hospitales lleguen los pacientes referidos o quienes por alguna razón fortuita su vida esté en peligro”, insistió Rivas.
Informó que en la red sanitaria venezolana se encuentran los ambulatorios, sitios que procuran la prevención y atención primaria de enfermedades o malestares generales.
“La población debe tomar conciencia sobre las verdaderas emergencias para no colapsar estos servicios. Si tiene un malestar o problema de salud menor debe acudir primera a una consulta médica en los ambulatorios”, precisó el especialista en medicina crítica.
Sobre el posgrado universitario en el área, mencionó que cuentan con cinco residentes en la actualidad, dos en el primer año y tres en el tercer año.
Las emergencias
El servicio de emergencia es la unidad donde se concentran las facilidades físicas para la atención de pacientes niños y adultos que presentan urgencias médico quirúrgicas en forma individual, colectivas y atención masiva de pacientes en caso de desastres.
La atención en dichas áreas se pueden clasificar de las siguientes formas:
Urgencia médica leve
Situación clínica de un paciente en la que sólo requiere tratamiento sintomático y su vida no corre peligro. Debe ser atendida previa a la clasificación de la situación clínica que la realiza un profesional de la salud capacitado.
Urgencia médica moderada
Situación clínica de un paciente en la requiere necesariamente de consulta médica y exámenes complementarios y una proporción puede requerir internamiento.
Urgencia médica grave
Situación clínica donde el paciente no puede movilizarse ni valerse por sus propios medios y requiere internamiento y/o intervención quirúrgica inmediata. En ambos casos la vida del paciente está en riesgo de perderla.
El traslado de pacientes, que requieren de atención médica inmediata, y la necesidad de una rápida respuesta del equipo de salud en el momento oportuno, obliga a considerar prioritariamente la localización, organización y todos los desplazamientos en esta Unidad.
En consecuencia, factores como la ubicación de la Unidad de Emergencia, su accesibilidad, los sistemas de comunicación, transporte con su equipamiento disponible y el personal capacitado, son de vital importancia para salvar vidas.
Ningún otro servicio hospitalario tiene mayor impacto urbano, como la unidad de emergencia.
Ubicación ideal
La ubicación de la Unidad de Emergencia debe ser en zonas no vulnerables, ya que no debe estar expuesto a inundaciones, deslizamientos de terreno u otros desastres naturales.
El terreno debe encontrarse a nivel a fin de facilitar el acceso y tránsito de pacientes, equipamiento rodable y vehículos, como también permitirá las acciones de evacuación a demandas masivas de atención en caso de catástrofes.
En tal sentido, la Unidad de Emergencia debe ubicarse en una zona de fácil accesos y que esté próxima a la Unidad de Ayuda al Diagnóstico, Centro Quirúrgico y Hospitalización.
La ubicación determinada debe cumplir con las siguientes consideraciones:
* Facilidad de acceso desde el exterior.
* Edificación de un solo nivel.
* Vulnerabilidad estructural mínima.
* Fácil comunicación con las Unidades de Ayuda al diagnóstico, centro quirúrgico y áreas de hospitalización.
* Área suficiente para abarcar el Programa Médico establecido.