¿Qué buscan?
En un solo día, el gobierno allanó la residencia de Oscar López, operador político muy cercano al Gobernador de Miranda, dictó el Tribunal Supremo de Justicia las sentencias despachando, con más adjetivos que Derecho, las impugnaciones presentadas al cuestionado proceso electoral presidencial de abril pasado, se impuso una multa y se pasó al Ministerio Público a Henrique Capriles, hizo la Contralora una rara declaración interpretando sentencia del TSJ con fines de intrigas intra opositoras y, otra vez, desde la cabeza del Ejecutivo, se profirieron amenazas e insultos hacia dirigentes de la Unidad e incluso se anunció como un hecho la detención de un presunto “jefe de la mafia de la derecha” aún no mostrado ni identificado.
Las causas de esta ofensiva son discutibles. Los analistas la atribuyen a motivos diversos: debilidad, radicalización, consecuencias de la ausencia de liderazgo. Pero lo que está claro son sus propósitos. Se busca dividir la Unidad, desmoralizarla y silenciarla. Que esos fines se logren o no depende, fundamentalmente, de cómo los asuma y enfrente, la alternativa.
¿Por qué?
La gran ventaja de los sectores alternativos es la Unidad, concretada en la Mesa de la Unidad Democrática, un instrumento perfectible pero existente, real, tangible. El gran problema del gobierno es precisamente la Unidad de quienes presentan una política alternativa. Por eso la atacan con tanta fuerza. Por eso no le dan tregua. Usan, para minarla, el poder público, su poder comunicacional y su poder económico. Y, hasta ahora, no han conseguido su objetivo.
Tener conciencia de esa realidad es básico en la dirigencia de la Mesa de la Unidad, con responsabilidad en el cumplimiento de su compromiso con el país. También en aquellas individualidades y sectores que por visión distinta o cualquier otro motivo, siendo opositores no están en la Unidad. La Unidad es una política, así que puede haber desacuerdos con ella, lógico, pero desconocer su valor sólo ayuda a los propósitos del poder actual.
El 8-d es la cosa
La importante elección municipal del 8 de diciembre, completa su elenco de nominaciones a las doce de la noche del viernes 9.
La Mesa de la Unidad distinguirá sus candidatos con la tarjeta de la Unidad, aunque aceptará apoyo de otras que en la región no respalden a competidores. El bloque del gobierno irá con las tarjetas del Psuv, el PCV, otras, y las de PPT y Podemos que adquirió por Gaceta, sin embargo la propaganda será para los símbolos del Psuv.
La Mesa de la Unidad seleccionó sus candidatos a alcalde mediante primarias en la mayoría de los casos, en los demás por acuerdos unitarios de base muy amplia y según reglas previamente acordadas y conocidas. Con estas mismas caracterìsticas fueron postulados los candidatos a concejales, por acuerdos unitarios en las regiones. Solo dos estados tuvieron que procesar sus entendimientos a nivel nacional, realizadas las consultas y conversaciones necesarias. El bloque del gobierno ha anunciado sus candidatos en los últimos días, los escogió por un método secreto y desconocido, aunque había anunciado primarias.
Los candidatos de la Unidad tiene un programa paraguas, el Compromiso Gestión Municipal para el Pueblo y el Progreso. El compromiso de los candidatos del Psuv y aliados es apoyar a la revolución y a Maduro.
Las postulaciones de la Unidad son de sus municipios, provienen de las luchas allì y por eso se han hecho conocidos en sus localidades. Han salido de cada municipio, no han caído sobre ellos en paracaídas. El Psuv escogió sus aspirantes “por el baremo y la evaluación político-social” según la ingeniero Jacqueline Farias, lo cual determinó en algunos casos antiguos jugadores de beisbol, dos ministros, un general y animadores de televisión.
El verdadero baremo
La realidad es el baremo por excelencia para evaluar los éxitos de una política y de la gestión que esta guía. Veamos algunos datos conocidos esta semana.
Se controlan los precios para combatir la especulación y las alzas, pero los rubros controlados acumularon inflación del 24%. Se controla el tipo de cambio para defender las reservas, pero estas cayeron en más de un tercio. Se aumenta el salario mínimo, pero el salario real se contrajo en términos reales en el año, porque el BCV reconoce que la inflación lo superó. Se habla mucho de lucha contra la pobreza, pero los más pobres han sufrido una inflación de 29.8% en lo que va de 2013 y 58.7% en un año. Se proclama la seguridad alimentaria, pero los precios de los alimentos han subido 39.5% en siete meses y en 14 años las exportaciones de comida son la un décimo de lo que eran en 1999 y los planes agrícolas han terminado en baja de la producción y aumento de las importaciones. Se pone a los servicios privados de salud en la mira, pero en la salud pública el caos desborda el Pérez Carreño, el Periférico de Coche está intervenido, en cierre técnico El Algodonal y en crisis Los Magallanes y eso solo en Caracas, ¿cómo estará el resto del país? Se promueve una ley para regular la venta de vehículos, pero no hay producción suficiente de ellos, es 33.8% menos en lo que va de año. Se dictó una ley para regular el alquiler de viviendas, pero el mercado de arrendamientos ha caído en un 90%. Se anuncia y ejecuta la Misión Patria Segura, pero la violencia, se calcula, puede dejar 25.000 muertos este año y van 3.355 ingresos en la morgue de Caracas y una banda armada asaltó treinta turistas en un hotel margariteño y mataron a una mujer por un celular en Terrazas del Club Hípico y asesinaron a un efectivo de la Policía Nacional Bolivariana en el Cementerio General del Sur y cinco muertos deja noche de terror en La Vega y condenan a El Nacional por informar sobre la violencia
