El diagnóstico precoz es la forma más efectiva de combatir cualquier problema de salud. Siendo el cáncer una enfermedad de lenta evolución, es posible neutralizar sus efectos degenerativos e impedir sus devastadoras consecuencias sobre el organismo, si se detecta y ataca en sus primeras fases.
Barquisimeto cuenta con una nueva herramienta para reforzar la labor preventiva de afecciones oncológicas en la región mamaria y axilar, que ayudará a complementar el diagnóstico ofrecido por la mamografía. Se trata de un ecotomógrafo, capaz de realizar un análisis denominado tomografía ecográfica de la glándula mamaria en 3D.
“La mamografía es la columna vertebral del diagnóstico temprano. Sin embargo, en ocasiones arroja falsos negativos, donde aparentemente todo está normal pero la persona tiene alojado un cancer”, explicó el doctor Jorge Uribe, mastólogo y director de la Clínica de Mamas.
Apuntó que entre 8 y 10 por ciento de los tumores malignos no son perceptibles a través de la mamografía, sobre todo en los senos que presentan mayor densidad radiológica, es decir, aquellos que en su composición tienen menos grasa y más glándula mamaria.
“La tomografía ecográfica volumétrica en 3D ha venido a solucionar esa dificultad de la mamografía, porque no utiliza rayos X sino ondas de ultrasonido y proyecciones, que elaboran una fotografía completa de la glándula mamaria. El nuestro es el primer dispositivo en su género que se instala en América Latina”, expresó.
Detalló que «cada cinco milímetros el aparato hace un corte en la representación digital de la mama. Luego un software especial reconstruye en una estación de trabajo toda la glándula, permitiendo que el especialista pueda revisarla corte por corte”.
“Es muy importante dejar claro que este proceso no viene a sustituir a la mamografía, sino que es el complemento necesario para ampliar en conjunto el diagnóstico precoz del cáncer de mamas”, advirtió.
La doctora María Lourdes Anzola, primera venezolana acreditada para operar el ecotomógrafo, expresó que “lo importante no es el aparato, sino la debida formación del profesional que aplica los procedimientos”. Su certificación la obtuvo en la Universidad de Tarragona (España).
Diagnóstico temprano
Uribe recalcó la necesidad de detectar el cáncer en sus primeras etapas, a fin de tratarlo en una etapa donde resulte inofensivo e impedir males mayores.
“Un cáncer no se desarrolla de un año a otro. Un tumor necesita entre cinco y seis años para alcanzar unas dimensiones que lo hagan palpable al tacto”.
Recordó que el cáncer de mama es la primera causa de muerte en la mujer venezolana, “pero estoy convencido de que eso no debería ser así, siendo una dolencia perfectamente detectable utilizando las herramientas que tenemos a la mano. Diagnosticar temprano significa ahorrarle al paciente cualquier cantidad de complicaciones que puedan comprometer su salud, su bienestar y su vida”.
Implicaciones genéticas
El doctor Uribe explicó que existen malformaciones congénitas en algunas mujeres, que pueden incrementar el riesgo de contraer cáncer de mama o de ovarios en un 80 por ciento. Citó el caso de la actriz norteamericana Angelina Jolie, que tras un análisis de determinación de genes decidió practicarse una mastectomía profiláctica, consistente la extracción de las glándulas mamarias y su sustitución por prótesis.
Indicó que esas alteraciones genéticas, denominadas BRCA1 y BRCA2, pueden identificarse a través de exámenes que actualmente se están realizando en la institución que dirige, en coordinación con el laboratorio británico South Genetic.
“Estos análisis no son dirigidos a todas las mujeres, sino a algunas con ciertas condiciones específicas e historia familiar que lo ameriten, porque sus resultados implican situaciones bastante traumáticas emocionalmente para una mujer”, puntualizó.
