El general Luis Bohórquez Soto ha sido escogido desde arriba para ser candidato a la alcaldía de Iribarren con el propósito de que el Partido Socialista Unido de Venezuela trate de recuperar el espacio perdido, según el análisis hecho por el politólogo y profesor universitario Horacio Zavala.
Hasta hace poco, como primer elemento a considerar, este militar venía cumpliendo funciones públicas, pero en su ámbito. No ha hecho carrera política dentro de los barrios y el mismo partido no lo conoce.
En segundo término, indudablemente, con esa candidatura se demuestra que el PSUV, sacando las cuentas, no tiene posibilidades de ganar la alcaldía.
El tercer elemento, esa candidatura le hace daño a Bohórquez porque, primeramente, va a perder y eso será un manchón en su vida pública y, además, en su carrera militar podría haber alcanzado otro rango, como llegar a ocupar una alta posición dentro del componente militar al cual pertenece, e incluso, dada su condición de militante del PSUV, ser nombrado ministro de la Defensa.
Este militar, en el argot beisbolero, es un out por regla, ya que si nos colocamos en el campo del juego, el PSUV ha sufrido tres derrotas consecutivas en Iribarren: la del 7 de octubre cuando Hugo Chávez fue candidato presidencial; el 16 de diciembre al ganar la gobernación Henri Falcón frente a Luis Reyes Reyes, compadre del Presidente y amigo de toda la vida; y el 14 de abril, porque a pesar de que Maduro se alzó con la presidencia de la República en esta jurisdicción fue derrotado.
Si el chavismo no pudo retener su poderío en Iribarren ni cuando Chávez estaba vivo y ganó con más de un millón de votos el año pasado, menos podrá lograrlo con un candidato que no tiene arrastre popular, que no ha hecho vida en los barrios y que, aparte de eso, tiene que cargar con un bacalao, como ha sido la gestión de la profesora Amalia Sáez.
En este sentido, Zavala considera que el motivo principal por el cual el PSUV no se resteó con la alcaldesa como ha hecho con Jorge Rodríguez en la alcaldía Libertador, donde ha sido un pésimo funcionario, es porque el chavismo la consideró responsable de los reveses sufridos por ese partido.
No hay que olvidar que Amalia Sáez ha sido la jefa de las campañas y se ha convertido en la mariscal de las derrotas.
Ahora, el PSUV o lo que es lo mismo, Maduro, tratando de pegarle un palo a la lámpara, para ver si le pega, decidió inclinarse por Bohórquez.
Porque el candidato lógico tenía que ser Luis Jonás Reyes Flores, porque es después de su padre, Luis Reyes Reyes, el principal dirigente. Pero, si ya el padre fue derrotado estando Chávez que le creó una gobernación paralela y no existiendo la posibilidad de recuperar a Iribarren, se irían al fondo los Reyes.
