“En Boyacá, soldado del honor. En Ayacucho, patricio de la libertad. En Pantano de Vargas, héroe del deber”.
Esas frases que se pueden leer en el pedestal sobre el que permanece el busto del general José Florencio Jiménez Sandoval cobraron mayor fuerza este sábado al celebrarse los 224 años de su natalicio, así como 393 de la fundación de Quíbor y el día de la Bandera Nacional.
Las actividadades conmemorativas se iniciaron a las 8 de la mañana con una misa de acción de gracias en el templo Nuestra Señora de Altagracia, seguida por el acto central en la plaza que lleva el nombre del prócer independentista y una sesión especial del Consejo Legislativo de Lara en el salón de reuniones del Concejo Municipal de Jiménez.
El alcalde del municipio, Luis Plaza; el comandante de la base aérea teniente Vicente Landaeta
Gil, general de brigada Ángel Emiro Fréitez Bencomo, y el presidente del Consejo Legislativo, diputado Luis Jonás Reyes encabezaron el acto.
También estuvo presente, como todos los años, la profesora Arminda Jiménez, descendiente del prócer.
En el mismo, la primera autoridad municipal condecoró con la orden Florencio Jiménez al general Fréitez Bencomo, al ex gobernador Luis Reyes Reyes y al empresario Alejo Hernández, a este último por sus valiosos aportes al desarrollo industrial del municipio Jiménez.
Representantes de un considerable número de organismos, en su mayoría dependientes de la alcaldía, colocaron ofrendas florales ante el busto de Jiménez.
En el marco de ese acto, el alcalde Plaza destacó la importancia de la fecha y de la decisión del CLEL de celebrar una sesión especial en Quíbor, algo que ocurriría por primera vez.
Recordó palabras del Papa Francisco en el sentido de mantener siempre las esperanzas por un futuro mejor y dijo que, siguiendo los lineamientos del líder fallecido, Hugo Chávez, continuaban trabajando.
Plaza afirmó que diferentes organismos siguen haciendo casas en el municipio esperándose que antes de que concluya el año se hayan levantado unas 1.200.
Sobre el tema político y su candidatura o no a la reelección, expresó ser un militante disciplinado dispuesto siempre a acatar la decisión que se tome en el PSUV.
Posterior al acto de la plaza, las autoridades y público asistente se trasladaron a la sede del Concejo Municipal donde se llevaría a cabo la sesión especial del CLEL en honor al prócer de la Independencia.
La sesión, antes que un homenaje al general José Florencio Jiménez, estuvo dedicado al presidente Hugo Chávez Frías.
Comenzó con la develación de una pintura del mandatario fallecido, la cual fue colocada en el centro del salón, por encima de las del Libertador Simón Bolívar y del general Florencio Jiménez.
Comprobado el quórum reglamentario con la presencia de los diputados oficialistas y de la Mesa de la Unidad Democrática, se procedió a la presentación del orador de orden, profesor Yonjarman Pérez, egresado magna cum laude del Pedagógico de Barquisimeto, historiador y últimamente desempeñándose en el liceo Pepe Coloma de Cubiro.
Se esperaba, por su condición de historiador, un discurso dedicado a aspectos relativos a la trayectoria del héroe epónimo del municipio, su incorporación a temprana edad a la lucha independentista junto al Libertador Simón Bolívar.
Sin embargo, el profesor Pérez, cual dirigente pesuvista, dedicó la mayor parte de su intervención a rendir pleitesía al desaparecido presidente Chávez al que, prácticamente, llegó a calificar como único responsable de todo lo positivo que ha ocurrido en Venezuela durante unos cuantos años.
Algunos de los presentes entre el público, decepcionados por la desviación del nombre de la figura a quien se homenajeaba este día, optaron por comenzar a retirarse del recinto, no así los empleados municipales convocados al acto.
“Yo soy descendiente lejano del general Florencio Jiménez, pero ese señor como que sólo vino a hablar de Chávez y por eso me retiro”, se le escuchó decir a una joven mientras caminaba hacia el exterior de la sede municipal.
Mientras, la ciudad mantenía su ritmo normal de un sábado, con el comercio activado a plenitud.