Una considerable cantidad de los accidentes de tránsito que ocurren en Venezuela se originan por el pésimo estado en que se encuentran muchas vías principales debido a la falta de mantenimiento.
La advertencia la hizo Luis Vásquez Corro, directivo del Colegio de Ingenieros del estado Lara, quien ha venido haciendo una serie de denuncias sobre las condiciones de la vialidad en nuestro país.
Citó el caso de los puentes de carreteras principales existentes en el estado Lara especificando que el 70 por ciento de los 98 carece de mantenimiento, lo que podría traer consecuencias lamentables como la de La Guardia, en la autopista El Rodeo-Quíbor, arrastrado por la crecida de la quebrada El Negrete hace casi cinco años y aún no ha sido reconstruido.
“El 78 por ciento de las vías nacionales están deterioradas por la misma circunstancia, falta de mantenimiento, ya que en el Ministerio de Tránsito Terrestre parece no existir un departamento encargado de conservarlas en buen estado”, precisó.
Para el conocido profesional de la ingeniería, no existen medidas de previsión y sólo se actúa cuando ocurren daños graves en esas estructuras.
También llamó la atención sobre el estado de la carretera Duaca-Aroa, concretamente en los sectores Limoncito y Caraquita, donde una quebrada ha venido socavando la capa de rodamiento y en más de una oportunidad ha quedado interrumpido el tránsito automotor por el colapso de la misma.
El año pasado una comisión del Colegio de Ingenieros realizó una inspección a algunas arterias viales larenses y pudo constatar el mal estado de las mismas.
En algunas los huecos son continuos y con frecuencia originan accidentes automovilísticos cuando los conductores son sorprendidos por esas irregularidades y al maniobrar pierden el control de sus unidades.
Otra importante arteria vial que, según Vásquez Corro, no recibe el debido mantenimiento, es la Lara-Trujillo donde las fallas de borde son numerosas y también allí se registran frecuentemente accidentes.
“Esa es una carretera tipo “A” que se encuentra desasistida por completo como lo puede constatar cualquiera que la recorra entre el distribuidor Sabaneta, en Torres, y Agua Viva.
Estima que la situación se agravó cuando el gobierno Nacional despojó a las gobernaciones de la competencia para asistir sus carreteras pues pareciera como si en Caracas no les importara el deterioro de las mismas y por lo tanto las delegaciones regionales del MTT no actúan.