Como parte de las ayudas sociales que entrega Bandesir a las personas más necesitadas de las comunidades, este martes beneficiaron a ocho pacientes en sillas de ruedas, sumado a los cinco bastones de cuatro puntos y un coche especial.
Así lo informó Yuyita de Chiossone, presidenta de Bandesir Lara, quien estuvo acompañada por Luis Martínez, María Gabriela Saab, Mirna Soto y Armando Arrieta, de la junta directiva de Fundasab.
Estos equipos médicos son facilitados en forma de comodato o préstamo, de manera que cuando los pacientes cuando no requieran su uso, sobre todo en el caso de quienes se encuentran en rehabilitación, lo devuelvan en buen estado para que le sirva de utilidad a otra persona.
Chiossone informó que el coche especial para un niño con parálisis cerebral fue elaborado de forma artesanal por otra persona con discapacidad, pero que todavía no ha podido instalar su fábrica para atender de manera más rápida las peticiones que le llegan.
“Para la reparación de sillas nos faltan repuestos y la escasez de los aparatos clínicos también nos golpea, porque aunque encontremos donaciones efectivas, no tenemos dónde adquirir las ayudas”, precisó con preocupación Chiossone.
Bandesir es una organización que llevan adelante un grupo de voluntarios, pero que debido a las dificultades en algunos estados del país ya no cuentan con esta ONG.
Como mencionó María Gabriela Saab, quien se encuentra en sillas de ruedas después de un accidente de tránsito, aún falta sensibilidad en la población sobre el tema y mayor conciencia en quienes dirigen los destinos del país.
“Cualquier persona puede tener un accidente, o bien, de una u otra manera, al llegar a viejos tendremos alguna discapacidad, porque nuestras funciones van cesando. Todos necesitaremos de apoyo en este sentido en algún momento”, advirtió Saab.
Por ejemplo, recalcó que para ella es indispensable la barra en los baños para sostenerse, así como rampas para entrar a los edificios o caminar en las aceras.
“Ni siquiera en los edificios públicos se cumple este mandato de ley, las barreras arquitectónicas persisten en nuestras ciudades”, estimó Saab.
Desde Sanare
Bandesir recibió la visita de representantes de la fundación Ángeles de Dios, quienes apoyan a personas con discapacidad en el municipio Andrés Eloy Blanco.
Recordaron que según el censo de la misión José Gregorio Hernández, del año 2009, en esa zona habitan 2.920 personas con alguna discapacidad, sin embargo, no existe una política de ayuda e integración, a pesar de la legislación y organismos creados para tal fin.