Tras un recorrido por las calles de Río de Janeiro, el papa Francisco y la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, llegaron al Palacio de Guanabara.
A las 2:15 p.m. (hora de Venezuela) el avión en que viajaba el papa Francisco arribó al Aeropuerto Internacional de Río de Janeiro, lugar donde participará en la XXVIII Jornada Mundial de la Juventud (JMJ).
El Papa Francisco agradeció la bienvenida del pueblo brasileño.
«Permítanme entrar en el corazón de cada brasileño, pido permiso para entrar y pasar esta semana con ustedes».
Traigo conmigo lo más valioso que se me ha dado: Jesucristo, vengo en su nombre para alimentar la llama del amor eterno que arde en su corazón.
«Cristo tiene confianza en los jóvenes y les confía su misión, mi esperanza es que los jóvenes se muestren a la altura de los retos que se les impone».
«No traigo ni oro ni plata, pero sí lo más precioso, lo más valioso que se me ha dado: Jesucristo»
«En estos momentos los brazos del papa se extienden para abrazar a Brasil… que nadie se sienta excluido del afecto del Papa»
Bendijo al pueblo brasileño y saludó a la Presidenta Dilma Rousseff.
Miles de peregrinos de todo el mundo lo esperaban en las calles en clima de fiesta para dar la bienvenida al primer papa latinoamericano de la historia.
El papa presidirá la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) del 23 al 28 de julio, a la que asistirán más de un millón y medio de personas.