La nueva ministra de Defensa, Carmen Meléndez, negó este domingo que el gobierno cubano hubiese incidido en los ascensos militares del país, pues asegura tener al alto mando «más unido que nunca».
«Eso es mentira, yo estuve al lado de él (del presidente Nicolás Maduro) los últimos meses y todo el tiempo las listas las manejó él», dijo Meléndez al ser consultada por el periodista y exministro del fallecido expresidente Hugo Chávez, José Vicente Rangel, en su programa dominical.
«Todos los años, cuando viene la época de ascensos comienzan los ruidos para tratar de desestabilizar al gobierno», respondió la ministra. «Ahí tuvimos un presidente abocado a los ascensos. Él revisó esas listas, desde el primer sargento hasta generales y almirantes», agregó.
La influencia de Cuba en las decisiones del gobierno venezolano ha sido altamente cuestionada por voceros de la oposición durante años.
El general retirado Antonio Rivero, quien fue uno de los hombres importantes del chavismo y luego saltó a la oposición, denunció en mayo pasado que el G2 cubano ha tenido presencia en Venezuela desde 1996. «Conocí parte de la incursión de militares del G2 cubano», declaró al canal Televen.
Un mes después, Rivero también habló de la presencia de más de 300 militares cubanos en el país y ha hecho varias denuncias al respecto, que le costaron una imputación en 2010 por la presunta comisión de los delitos de «ultraje» a la Fuerza Armada y revelación de informaciones secretas.
Aunque la ministra Meléndez negó este domingo la influencia del gobierno cubano en las Fuerzas Armadas, su predecesor, Diego Molero, defendió en junio pasado el asesoramiento que recibe su país de la Fuerza Armada de Cuba, aunque descartó que «actúen o influyan».
Meléndez también negó la posibilidad de que en Venezuela pueda gestarse otro abril de 2002, fecha del golpe de Estado que derrocó brevemente a Chávez. «Tenemos una Fuerza Armada fortalecida, el alto mando comprometido con la patria», aseguró. No obstante, dijo que permanecerá atenta a cualquier movimiento.
