El atacante Rafael Castellín justificó su decisión de apartarse de las canchas por al menos seis meses al señalar que necesita dedicarle tiempo a “proyectos personales y familiares” y agregó no es una adiós definitivo, porque espera regresar en enero con el Deportivo Lara o cualquier otro equipo.
“Tengo que aprovechar el momento, no me siento arrepentido sino más bien agradecido por todos los clubes que pasé, especialmente con el Lara. Por la afición, por la gente, lo que significa el fanático, el hincha de aquí de Barquisimeto, estoy muy agradecido, y a la vez muy triste por esta decisión que yo mismo tomo, pero son cosas que yo creo que van a ser positivas para mi vida y que esperemos que todo salga bien y, si tengo una vuelta, ojalé que sea con el Lara, estoy muy agradecido con todos”, manifestó Castelo, mediante una nota de prensa despachada por el equipo.
El punta de 37 años estaba decidido a jugar una campaña más y había pactado una renovación con el club rojinegro, pero durante el mes pasado, tras algunos días de reflexión y de discusión con sus seres queridos, se inclinó por la opción de tomar una pausa, sin anunciar su retiro definitivo. Por esa razón, en acuerdo con la directiva, rescindió el contrato que lo unía a la institución.
“El año pasado terminé como no quería, me hubiese gustado terminar de otra manera, por eso quedé como dijera uno en lo criollito ‘picado’, pero después fui a la casa, conversé mucho con la familia, aunque la mayoría no estuvo de acuerdo con la decisión, yo pienso que es una decisión más personal por los momentos que se me están presentando”, admitió Castellín, quien pasó de ser el máximo artillero del campeonato a ser un jugador del banco.