Política y penalmente alguien debe ser sancionado por el desastre en el servicio de recolección en Palavecino.
Así lo señaló el exalcalde de Palavecino y dirigente regional de Avanzada Progresista Freddy Pérez, quien además expresó que en otro país, ya Richard Coroba y los tres presidentes del Instituto de Servicios Públicos, estarían tras la rejas.
Precisó que hay en estos momentos más de 1.500 toneladas de basura acumuladas en las calles de las tres parroquias de la jurisdicción.
-Decenas de urbanizaciones están contratando camiones privados, para deshacerse de la contaminación, pero no hay garantía de que esta basura sea depositada en el Vertedero Controlado de Pavia, lo cual genera mayor grado de insalubridad y otros problemas ambientales.
Iasmupal está quebrado
Por otra parte, Pérez enfatizó que la Contraloría General del estado Lara debe intervenir en lo inmediato el Instituto de Aseo Urbano de Palavecino.
-El servicio de recolección colapsó y el instituto quebró, sin que la Contraloría Municipal se haya pronunciado al respecto, sellando cualquier posibilidad, tanto al ciudadano común como a los medios de comunicación, cualquier indagatoria al respecto, razón por la cual en los próximos días solicitaremos a la máxima instancia contralora en la entidad, una averiguación sobre los recursos de este instituto que, repetimos, está quebrado luego de las campañas del PSUV, subrayó el dirigente político.
Amplió que el barrido de calles, la profilaxia vegetal y el ornato, desapareció como servicio público.
Sólo seis unidades compactadoras funcionan correctamente sin recursos para la compra de repuestos por la carencia de recursos y la incapacidad de la gerencia.
-En Iaspmupal la improvisación y la ineficiencia han sido la constante, situación que afecta a miles de niños y ciudadanos de este municipio, remarcó Pérez.
Desde que el Municipio tomó la administración del aseo urbano, acentuó, este deplorable servicio ha aumentado hasta en 300%, es decir, es un atraco a mano armada.
Milmillonarios ingresos
Pérez precisó además que los ingresos del instituto sobrepasan los dos millones 500 mil bolívares, recursos suficientes para administrar el importante servicio, tomando las mismas palabras del alcalde Richard Coroba cuando despojó a Sateca de la concesión, “pero la ineficiencia es mayor”.
El instituto inició con seis camiones nuevos y un fondo de 1.500 millones de bolívares, patrimonio hoy en ruina.
De 160 empleados y obreros que tenía la compañía privada de recolección hoy tenemos más de 220.