Escuela de Artes y oficios Bolivia Tovar

La Escuela de Artes y Oficios Bolivia Tovar ha elaborado durante 68 años una enciclopedia fortificada de realidades, registrando en sus páginas a notables damas y caballeros de nuestra sociedad.
Su personal directivo, docente, administrativo y obrero, mantienen el prestigio de esta noble institución conjuntamente con quienes han transitado por la senda del aprendizaje, la cual, con sus 30 talleres actualizados ha evolucionado en su alta demanda que supera los 1.600 cupos.
Alistados en una profesión socio-productiva se incorporan rápidamente al progreso y desarrollo económico de la nación a través de los talleres de manualidades, copando la expectativa de quienes llegan con objetivos claros y deseos de aprender.
En esta fecha aniversario continúa como patrimonio cultural del estado Lara, aceptación hecha el 30 de junio del 2005, y distinguida el pasado 28 de mayo con la orden Jacinto Lara en su primera clase.
En los archivos del Centro de Historia Larense existen libros los cuales afirman que en el año 1640 funcionarios de un convento de franciscanos trajeron a Venezuela 14 monjas que enseñaban a leer, escribir y aleccionar sobre carpintería, formando además sastres, jardineros, pintores, escultores y otras especialidades, oficios que según el historiador Raúl Azparren en su libro Barquisimetaneidad, personajes y lugares, se desarrollaban en la capilla de San Francisco, hoy sede del centro de historia.
Sería en 1883 cuando el Presidente de Estado, general Juan Jacinto Lara, creó por decreto la Escuela de artes y oficios dirigida por el maestro Rafael Antonio Pino.
En 1923 funcionó en la calle Obispo, (hoy calle 26), con el nombre de “Escuela de artes y labores femeninas, bajo la dirección de Carmen Aurora Liscano y Ana Dolores Gudiño.
En su devenir por la historia la ilustre educadora y poetisa barquisimetana Deodata “Koka” Irigoyen de Montero, fundó las primeras escuelas de corte y costura en barrios del oeste de la ciudad en 1938, logrando el 24 de octubre de 1945 la aprobación legal, en todos sus géneros, en la ley de educación  nacional.
En 1940 el gobernador del Estado, general  José RafaelGabaldón, concentró en el edificio del cine Rialto, calle 29 entre 20 y 21, La escuela de música, artes plásticas y el instituto de enseñanzas especiales que luego se convertiría en Escuela de artes y oficios. Los primeros días del mes de julio de cada año, los académicos exhiben orgullosos magistrales trabajos de aventajados alumnos en la conclusión de sus cursos, ante un numeroso público que son fieles testigos de la excelencia.
Hoy los docentes de esta casa de estudios, conocedores de la realidad y el reto del emocionante mundo de la producción independiente, perseveran con sus mejores técnicas e insisten en la integración docente-alumno, elevando así, la autoestima de quienes procuran el éxito, para identificarlos con su honesto rol dentro de la sociedad.
El trabajo manual es una alternativa y en consecuencia reconoce al docente como orientador y motivador de las potencialidades de los alumnos, pues su nivel académico se supera en concordancia con el proceso educativo y capacidad creativa.