Entre las jugadoras de la preselección adulta femenina de baloncesto de Venezuela, que entrenan a diario a las órdenes de los técnicos larenses Oscar Silva y Silverio Leal en Barquisimeto como preparación hacia el Suramericano de Naciones, a jugarse en Mendoza, Argentina (23 al 27 de julio), reluce el nombre de Cleyder Blanco, de las Lady Coyotes de Weatherford College en Texas, Estados Unidos.
Blanco, una pívot de 23 años de edad y 1.84 metros de estatura oriunda de Caracas, viajó por primera vez con la selección de mayores en 2004, con apenas 14 años de edad y fue parte de la generación que obtuvo medalla de oro en el suramericano juvenil de 2007 en Ecuador.
Tras representar a Distrito Capital hasta la categoría juvenil, tuvo ocasión incluso de jugar para Lara en dos nacionales de mayores, en los que logró un título y un subcampeonato. Es referencia del equipo criollo en la era post María Ofelia Villarroel, jugadora que tras coquetear con la WNBA y hacer una gran carrera en Suiza, pasó al retiro para formar una familia.
Las otras repatriadas en esta convocatoria son Daniela Wallen (Independence CC), Waleska Pérez (Weatherford) y Roselis Silva (Arkansas). Incluso Ivaney Márquez (University of Science and Arts Oklahoma) tiene un valioso pasado en Estados Unidos.
Orgullo nacional
“Estoy feliz por volver a Venezuela, asistir a una competencia internacional y aportar mi experiencia. Creo que este año deberíamos clasificar al Premundial. Tenemos a varias jugadoras afuera como Daniela Wallen, Waleska Pérez y Roselis Silva y esas son las experiencias que nos ayudarán a ir mejorando y hacer un buen papel”, dijo la muy sonriente estudiante de Criminalística.
Reveló que solicitó cambio de universidad y jugará los últimos dos años para la Universidad de Saint Thomas en el estado de Florida. “Al principio (ir a Estados Unidos) fue un cambio muy drástico. Notas diferencia en el ritmo de juego, cambias tu estilo de vida y tu mentalidad. El cambio te ayuda a madurar muchísimo. Estoy agradecida por la oportunidad que me dieron”.
Respeta el legado de María Villarroel. “Hemos compartido con ella a nivel de mayores y la experiencia que nos dejó nos ayudará a jugar igual o mejor de lo que ella lo hizo en este torneo que viene”.
Hizo referencia a la presencia previa de Venezuela en un Premundial FIBA Américas de la rama en Matto Grosso, Brasil, en el año 2009. “Ya estuvimos en un Premundial adulto y no nos fue muy bien, pero ya llegamos a ese tope. Queremos volver a vivir esa experiencia y creo que tenemos bastantes posibilidades de clasificar, porque avanzan cuatro y nosotras podemos meternos entre los tres primeros”.
Reconoce que en este grupo hay mucha juventud con cierta experiencia, mas no a nivel de mayores. “Va a ser un reto fuerte, pero no imposible. Debemos usar la rapidez y nuestro baloncesto venezolano, que las otras no tienen. Nuestro baloncesto es demasiado diferente y la gente tiende a envidiarlo. Mi entrenador en Weatherford me dijo alguna vez que nunca había visto el ritmo nuestro. Ojalá compensemos la falta de estatura con agilidad y madurez”.
Quien dio sus primeros pasos en el voleibol para luego cambiarse de disciplina, definió a Barquisimeto como “una ciudad muy grata” y dijo haberse sentido “feliz” al representar a Lara. “Estoy muy agradecida porque Oscar Silva sea el entrenador principal de la selección. Tiene mucha experiencia y creo que nos ayudará a creer más en nosotras mismas y lograr el objetivo este año”.