Reflexiones en positivo La deformación de la formación

Es muy triste y lamentable decir que nuestro país está muy enfermo y las medicinas que se aplican son peor que la enfermedad, pues la peor enfermedad es que en vez de cultivar amor, amistad y buenas relaciones, se cultiva el odio, la intriga y el desamor, se castiga al buen ciudadano y se premia al que significa una carga improductiva.
Debemos combatir esa grave enfermedad antes de que infecte a la gran población de buena voluntad, por medio de hechos positivos que estén por encima de los destructores, que se imponga la fuerza del bien y sobresalga la inteligencia que en nuestro país abunda y más temprano que tarde saldrá a relucir y ocupar su puesto por el bien de todos, poner en práctica lo que realmente distingue a las personas exitosas, el control de la ira, demostrar que con ejemplos podemos dejar enseñanza y esto nos produce paz espiritual, no olvidar que nuestras vidas serán la única Biblia que algunos leerán, entonces seamos ejemplo de todo lo que hagamos.
Pregunto: ¿Quién toma las decisiones en nuestra patria, debería hacer una profunda revisión en las alianzas o convenios con otros países y mirar con lupa quien es el ganador, ¿cuál es el beneficio que nos trae y por qué la dependencia de las principales necesidades tienen que venir de otro país a un costo muy alto?, como el enriquecimiento de ellos o de esos países y el empobrecimiento de nuestro país.
A mi poco entender pienso que esta es una amistad de una sola vía, lo que se va no regresa, esto es una incongruencia que no se le encuentra sentido, toda alianza debe ser como jugar tenis, una pelota va y la otra viene.
Según las estadísticas que he leído en cada cambalache o trueque que hacemos quedamos endeudados hasta la coronilla y no suficiente con eso empeñan nuestras riquezas, mientras que los vivos de otros países se enriquecen, dicen que nuestro país va palo a bajo, pero como en este país son más los hacedores que los destructores, mis oraciones a Dios, para que triunfe quien hace, calma o apacigua a los destructores, ojala no caigamos en algo que leí en la vaca sin culpa: “Muchas personas están y viven como un camión cargado de basura, están llenos de enojo, frustración, desaciertos y han acumulado mucho desprecio, necesitan un lugar donde tirarlo y si se les permite los vuelcan sobre ti”, página 20.
Pregunto: ¿Por qué ese desprecio al talento y capacidad del venezolano?, ¿por qué han fomentado la fuga de talentos?, ¿por qué se importa atrasos en vez de adelantos?, ¿por qué se subestima al venezolano con ideas y ganas de trabajar produciendo más de lo que se consume?, ¿por qué no se hacen las alianzas dentro de nuestro país, que todo quede aquí sin andar deambulando como si en este país fuésemos todos incapaces, buenos para nada?, ¿cuál va a ser el futuro de esa gran población joven que están llenos o sobrecargados de ideas?, ¿cómo se les motiva para que desarrollen sus ideas y pongan en práctica su sapiencia, sus aspiraciones, sus sueños, su amor por el país, su creatividad, generosidad y riquezas?, ¿qué garantía se les da a esta población con deseos de hacer, para que no se contagien con el desaliento y el mensaje grotesco de los que deberían dar ejemplo y respeto a quienes quieren apostar al desarrollo y a la prosperidad para todos, por medio del trabajo que dignifica al país esforzándose en su trabajo y no acostumbrándose al facilismo?
Son preocupantes para todos los que amamos el trabajo y buscamos la paz los ejemplos que hemos visto al rojo vivo, la deformación de la buena formación, la pérdida de la moral y el atropello a los jóvenes que desean aprender de los adultos supuestamente intelectuales, deformados de su buena formación con maestros de la intelectualidad honestidad y decencia como fue el caso del ilustre doctor Arístides Calvani a quien Dios tenga en el cielo, cómo se sentirá su alma al ver a uno de sus pupilos deformados e insultando a un grupo de jóvenes de la sociedad civil que desean ser partícipes del acontecer del planeta en una forma abierta, democrática, por el derecho que la inteligencia le confiere a todos los ciudadanos de buena voluntad. Este desplante insolente para vergüenza de los que buscamos la paz y la unión, fue protagonizado previo al inicio de la reunión de la OEA, nada más y nada menos por el máximo representante de nuestro paísen primera potencia del mundo, si este caballero es uno de los intelectuales, que Dios nos agarre confesados.
Unidos todos por la producción nacional.
[email protected]
@JGmendozabargto