El seleccionador brasileño Luiz Felipe Scolari aseguró el martes que las gigantescas protestas en Brasil contra los gastos multimillonarios del Mundial-2014 «no interfieren en el trabajo» de la ‘seleçao’, que se prepara para enfrentar a México el miércoles en la Copa FIFA Confederaciones.
«Nosotros apenas tenemos que hacer nuestro trabajo, podemos ver, asistir, tener opiniones, pero no interfiere en nuestro trabajo», dijo ‘Felipao’ en una rueda de prensa en Fortaleza (noreste).
Las manifestaciones, que el lunes alcanzaron su punto más alto en ciudades como Sao Paulo, Rio de Janeiro, Brasilia, Porto Alegre, con millares de personas volcadas a las calles, reflejan, entre otros, el descontento social por las millonarias inversiones para la organización de la Copa Confederaciones y el Mundial-2014.
«Es común y normal en una democracia que se acepten las demostraciones y situaciones sean recibidas y percibidas por nuestro gobierno o las personas involucradas. Esperemos que continúen pacíficas, democráticas y normales. Es lo que queremos», siguió el entrenador.
«La selección es del pueblo, somos del pueblo. Creo que estamos dando a la gente aquello que más esperan de nosotros, que el equipo vaya creciendo y pueda representar a Brasil», añadió.
Este mismo martes, tres jugadores de la selección –David Luiz, Hulk y Daniel Alves– se pronunciaron a favor de las gigantescas protestas de los últimos días.
«Mis jugadores tienen libertad de opinar sobre cualquier asunto, asumiendo su responsabilidad (…). Creo que estas expresiones normales de nuestros atletas son interesantes porque también parece que esta alineación impuesta a nuestros jugadores está dejando de existir», explicó el DT.
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