Ricardo García Longoria destacó en el país por su amplia trayectoria académica en el seno de las universidades y durante su ejercicio como rector designado para la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA); se preocupó por impulsar la democratización de esa casa de estudios.
El cuestionamiento que recibió de parte de la comunidad universitaria, tras su designación ‘a dedo’ como principal autoridad de una institución a la que no pertenecía, lo motivó a hacer lo posible por instaurar un sistema democrático que permitiera la elección de las autoridades mediante el voto directo y secreto.
Su esfuerzo devino en una reforma al Reglamento General de la UCLA que fue aprobada y publicada en Gaceta Oficial en el año 1992. Dos años más tarde, en 1994, se cristalizaron las primeras elecciones internas, según la Secretaría General de la UCLA.
Fue un humanista y abogado, su carrera docente inició en la Universidad de Carabobo, en 1973, como profesor contratado. Allí logró alcanzar el título de profesor titular. En la Escuela de Educación impartió las cátedras “Elementos de la Legislación Venezolana” y “Régimen legal de la educación en Venezuela”, vinculadas con su título de abogado.
En la Universidad de Carabobo fue estudiante, docente y empleado administrativo. Su interés por el estudio lo impulsó a realizar estudios de postgrado en la Universidad Estatal de Oklahoma, en Estados Unidos, donde obtuvo el título de máster en Ciencias: Administración de la Educación Superior.
El trabajo de grado realizado durante los estudios de cuarto nivel estuvo vinculado con el “Postgrado en Venezuela”.
García Longoria se desempeñó como consultor jurídico del Ministerio de Educación y durante cuatro oportunidades como viceministro encargado.
Durante su quehacer profesional y académico publicó distintas investigaciones tituladas: “Normas y reglamentos internos de la Universidad de Carabobo”, “ Liderazgo y toma de decisiones”, “Consideraciones sobre la Ley Orgánica de Educación” y “Estatuto único del personal docente y de investigación de la Universidad de Carabobo”.
Durante su ejercicio como rector de la UCLA enfrentó hechos violentos como la quema del vehículo oficial que le había sido asignado; el caso fue conocido en los tribunales y causó revuelo en la sociedad barquisimetana de la época. Un estudiante fue expulsado y considerado culpable del hecho.
El carácter serio, recto y responsable en el desarrollo de sus funciones le permitió manejar de la mejor manera ese tipo de situaciones en el seno universitario.
