La Organización de las Naciones Unidas pidió el miércoles a El Salvador que continúe sus esfuerzos y refuerce su lucha contra el trabajo infantil, que según las más recientes encuestas oficiales ha registrado un aumento.
La Representante Especial del Secretario General de las Naciones Unidas Sobre la Violencia contra los Niños, Marta Santos Pais, afirmó que el trabajo infantil doméstico, «cuando contraviene las normas internacionales, es una forma de violencia cometido contra las niñas, los niños y los adolescentes».
La representante de la ONU señaló, según un comunicado distribuido por la organización, que muchas niñas y niños trabajan como consecuencia de la pobreza, para ayudar a sus familias a obtener ingresos.
Santos, afirmó que «esta situación se vuelve inaceptable cuando las niñas, los niños y los adolescentes están siendo víctimas de violencia verbal, física o abuso sexual, se ven obligados a las formas más peligrosas de trabajo, cuando faltan a la escuela, cuando están en peligro o su salud y bienestar se deterioran».
María, una niña de 12 años, trabaja al igual que otros menores de su edad ayudando en pequeños comedores de unos de los mercados municipales de Santa Tecla, al este de la capital. «Yo trabajo para ayudar a mis papás, somos pobres y tengo que ayudar», dijo en una conversación con The Associated Press.
«Mi hermanito sale a vender lo que sea, mi mamá compra verduras o fruta y mi hermanito le ayuda», agregó.
La niña no supo explicar cuanto le pagan con exactitud. «Me dan un par de dólares y la comida, hay veces que más y también comida para llevar a la casa».
Según la Organización Internacional del Trabajo, el trabajo infantil doméstico hace referencia al trabajo realizado por personas menores de 18 años de edad en el sector doméstico, con o sin remuneración, en hogares de terceros o empleadores.
Según la Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples de la Dirección General de Estadísticas y Censos de El Salvador del 2012,en ese año se registraron 4.909 niñas y niñas realizando trabajo doméstico en casa de terceros, de las cuales, el 83% eran niñas. Del total de casos identificados el 6,3% no sabía ni leer ni escribir y solamente el 28% asistían a la escuela.
Decenas de niñas y niños trabajan en ventas informales en los mercados y calles de El Salvador. La mayoría de estos niños nunca van a la escuela y su destino está marcado para seguir trabajando en ventas informales.
La Encuesta indicó que en 2012 se registraron 191.599 niños y adolescentes entre las edades de cinco y 17 años que desarrollan alguna actividad para aportar a la generación de ingresos al hogar.
En el rango de edad de cinco a 17 años, el 72,7% corresponde al sexo masculino y el 27,3% al sexo femenino.