De Guatemala a…
El encuentro de los cancilleres Jaua y Kerry en Guatemala marca otra promesa de recomponer las relaciones entre Venezuela y los Estados Unidos. Van varias. Lo deseable es que esta vez los propósitos se traduzcan en hechos y las intenciones sean duraderas. El mismo miércoles, en la mañana y como muestra de buena voluntad, fue liberado y embarcado a Miami el cineasta norteamericano Timothy Tracy, quien estuvo preso por motivos estrictamente propagandísticos.
A través de algunos medios, el gobierno venezolano ha hecho saber sus “condiciones”, aunque si las gráficas revelan actitudes, el rostro del canciller de nuestro país no es precisamente de reclamo o exigencia. Ni siquiera se parece al que pone en esos discursos y comunicados de retórica anti imperialista. Pero eso es anécdota.
Lo que conviene a Venezuela es tener buenas relaciones, mutuamente respetuosas y provechosas, con todos los países de la Tierra. Y Estados Unidos es una nación muy importante, con la que los vínculos son múltiples, poderosos y de larga data. La política exterior debe ser nacional, en cuanto debe reflejar los valores e intereses perdurables de la nación, y no sólo los del gobierno, que es por definición transitorio. Y la verdad es que estos años, la política exterior ha sido privatizada. En vez de atender a criterios de Estado, gira en torno a intereses políticos de quienes gobiernan.
Desde hace tiempo quiere el gobierno remendar las relaciones que rompió. Unas veces por reacciones desmedidas a declaraciones de Washington, y otras en solidaridad con terceros. Por instrucciones de Caracas, venía conversando en Washington el embajador Chaderton (a cuya penosa performance en Guatemala la víspera no me referiré) con altos funcionarios del Departamento de Estado, y había anunciado Maduro su intención de designar a Calixto Ortega, un político de cierto nivel en el oficialismo, como enviado ante la Casa Blanca como encargado de negocios. Pero, sea por hipersensibilidad o decisión político-propagandística de cazar peleas polarizantes, desde aquí se interrumpió el camino con declaraciones altisonantes reiterativas de algunos de los lugares comunes preferidos en el repertorio revolucionario.
Lo que conviene a Venezuela es que esa relación se estabilice, y tome un curso serio y constructivo. Y que de allí salgan buenas noticias para los venezolanos. Por ejemplo la reapertura del Consulado en Miami, cuyo cierre injustificado ocasiona perjuicios reales a los venezolanos residentes en Florida, Georgia y las Carolinas, pues carecen de los servicios que les permitan hacer los trámites personales y de trabajo que necesitan, sin contar las dificultades para ejercer el derecho al voto. O la cooperación binacional en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, un requerimiento real de quienes padecemos la inseguridad. O la posibilidad real de repatriación de dividendos para las empresas norteamericanas que operan legalmente en Venezuela, que producen aquí bienes y servicios, que pagan impuestos, que invierten y generan puestos de trabajo aquí.
Lo que esperamos es que las accidentadas relaciones con el país del Norte, mejoren después del encuentro de Guatemala, en el marco de la Asamblea de la OEA. Que no vayan de Guatemala a Guatepeor.
Los riesgos de la propaganda
Sin mostrar la más mínima prueba, es línea oficial decir que la Unidad anda regando que en tres meses hay un cambio de gobierno. Es el modo escogido para sostener la reiterada acusación de golpista que se endilga a quienes, en la palabra y en los hechos, están empeñados en construir una alternativa política para un cambio que debe ser pacífico, democrático, constitucional y electoral.
Lo dijo el canciller cubano Bruno Rodríguez, lo dicen los máximos voceros del gobierno, y lo repite el portavoz comunicacional oficioso cada domingo en su programa y en las columnas que con o sin su nombre escribe. Estrategia para establecer una matriz de opinión. La lógica de esa manera de actuar debe ser mantener la unidad en sus filas y detener la hemorragia evidenciada el 14 de abril. Al régimen cubano, la línea de mostrarse constantemente asediado y amenazado le ha funcionado, pero hay diferencias que no son pequeñas entre aquella realidad y esta, por lo que sus recetas no son mecánicamente aplicables aquí. Que piensen en Miraflores y el Capitolio, la referencia excesiva a ese tema, puesto en el tapete por la publicación del audio del informe de Mario Silva al agente cubano, es decir de fuente interna, en lugar de fortalecer, debilita al gobierno, porque una prolongada lucha por la supervivencia puede pasar, fácilmente, de heroísmo a agonía.
Pdvsa preocupa
Venezolanamente, conviene poner atención a lo que ocurre en Pdvsa. Las exportaciones bajan por aumento en el consumo interno, cuyos precios tocan ya niveles microscópicos y que debe estar inflado por la corrupción generada por el contrabando de extracción, un negocio que para hacerlo en grande hay que estar enchufado. Al contrario, las importaciones petroleras subieron 7.2% en los primeros tres meses del año. 175 millardos de bolívares adeuda Pdvsa al Banco Central. Un periodista de la seriedad y experiencia de Orlando Galofré Amador, en El Nuevo País, viene trabajando el tema con asiduidad. Barclays Capital habla de una ligera caída en los ingresos y ganancias de la corporación. Las reservas suben, pero la producción disminuye. No se cumplieron las metas del Plan Siembra Petrolera 2005-2012, y los niveles de producción son menores a los de 2005. La refinación está, dice el analista, en “estado super crítico”, 2.7% de caída en los refinados que es mayor en gasolina con 3.5%. Petroleum Intelligence Weekly, la revista especializada, ubica a Pdvsa quinta empresa del mundo, detrás de la saudita Aramco, la iraní NIOC, Exxon-Mobil y la CNPC de China. En reservas es la sexta, en producción de líquidos es la séptima, pero en ventas es la número once. Síntomas para ser tomados en serio.
Cuando votar es reclamar
Insiste la Unidad en su reclamo judicial por las elecciones del 14 de abril. Las impugnaciones presentadas por Capriles y la MUD ante el TSJ están vivas, así como las opciones de organismos internacionales si las puertas institucionales de aquí se cierran y, desde luego, las del acompañamiento político y de calle a esa ruta. Un equipo de abogados trabaja permanentemente en eso, y la dirección política de la alternativa hace seguimiento.
Se aportan datos concretos acerca del uso de la identidad de personas fallecidas para votar. “Acá las brujas vuelan y los muertos votan” dijo el alcalde Ledezma. Las elecciones municipales del 8 de diciembre, aparte de su valor en sí mismas por la importancia del poder local, son la oportunidad de demostrar la realidad de Venezuela. Capriles llama a votar para vencer la trampa. Con participación, la trampa se debilita. Está demostrado. Votar el 8 de diciembre es un modo eficaz de reclamar las trampas y derrotar a los tramposos.
Rincón de libros
Un episodio de nuestra historia es revivido en detalle por el historiador Edgardo Mondolfi Gudat en El día del atentado. El frustrado magnicidio contra Rómulo Betancourt (Alfa. Caracas, 2013).
El 24 de junio de 1960, en la caraqueña avenida Los Ilustres camino al Paseo de Los Próceres a donde se dirigía para el desfile del Día del Ejército, una bomba esperaba por el Presidente de la República y estalló a su paso con la intención de asesinarlo. Un atentado real, no inventado, patrocinado por el dictador dominicano Trujillo y ejecutado por venezolanos. Buena lectura para quienes recordamos aquellos hechos, así como para quienes no los conocen.
Informarse y comprender es buen antídoto contra la propaganda.