Las noticias de que el gobierno de Estados Unidos ha espiado a usuarios de internet en todo el mundo no fue una sorpresa para los internautas globales, quienes dijeron el viernes que tienen pocas expectativas de privacidad en la red de redes a medida que los gobiernos monitorean cada vez más la vida digital de la población, muchas veces con la cooperación de las compañías de internet.
Defensores de la privacidad, preocupados por la supervisión selectiva del tráfico de internet por parte de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés), exhortaron a tomar medidas para proteger mejor la información digital, desde mensajes electrónicos hasta fotos y mensajes en las redes sociales. Pero la mayoría de las personas no usan programas de codificación ni otras herramientas para proteger la privacidad y parecen resignadas a que otros puedan tener acceso a su presencia en línea.
«No me sorprende en lo más mínimo. Llevan años haciéndolo», dijo Jamie Griffiths, un arquitecto de 26 años que trabajaba en su computadora portátil en un café de Londres. «Si quiero enviar algo que no quiero que nadie más conozca, no lo haría en un mensaje electrónico».
Desde Bagdad hasta Bogotá, muchos dijeron que revisan con todo cuidado lo que escriben en internet y dan por hecho que los gobiernos espían regularmente las actividades en línea, sea como parte de programas globales antiterroristas o de vigilancia nacional.
«Las redes sociales y los mensajes electrónicos siempre han sido vulnerables porque los que conocen de informática saben cómo penetrarlos», dijo Teolindo Acosa, de 34 años y estudiante de Pedagogía de la Universidad Central de Venezuela, que salía de un cibercafé en Caracas.
Documentos secretos filtrados muestran que la NSA y el FBI han estado escudriñando información personal mediante el acceso directo a los servidores informáticos en Estados Unidos de Google, Facebook, Microsoft, AOL, Skype, PalTalk, Apple y YouTube.
Después de las revelaciones del jueves, el presidente Barack Obama dijo el viernes que la vigilancia no «fue específicamente» sobre ciudadanos estadounidenses y otras personas de bien en Estados Unidos, lo que no significa que sus comunicaciones no quedaron atrapadas en la red de vigilancia.
Pero eso no atemperó la indignación de personas que se sienten ofendidas por lo que consideran el papel autoimpuesto de Washington como policía del mundo.
«Para Estados Unidos, todos son sospechosos, íhasta el papa!», dijo Alexander López, senador izquierdista colombiano. «Todos son vigilados estos días y esto debe plantearse en las Naciones Unidas».
López dijo que no tienen planes de cerrar sus cuentas de correo electrónico en Google y Microsoft porque piensa que lo espiarán no importa lo que haga.