La fiscal general de la República, Luisa Ortega, está obligada a investigar el contenido del audio de Mario Silva, que contiene denuncias muy graves sobre altos funcionarios del Poder Ejecutivo, Legislativo y particulares, expresó Pedro Pablo Alcántara, dirigente nacional de Un Nuevo Tiempo.
No solamente debe hacerlo porque así se lo establece la Ley del Ministerio Público, sino por la decisión número 1.113 del Tribunal Supremo de Justicia, según la cual todo hecho público, notorio o comunicacional no requiere de denuncia adicional para ser investigado.
Aún más, esa norma precisa que todo funcionario público en conocimiento de cualquier hecho está en el deber de iniciar las investigaciones que corresponden, de conformidad con las competencias que tuviera.
Eso incluye, no solamente al Ministerio Público, sino también a las oficinas de quienes dirigen programas y tienen conocimiento de irregularidades; a las oficinas internas de contraloría, así como a las dependencias de auditoría.
Existe un principio constitucional que indica claramente que todo funcionario público está en el deber de advertir y comunicar a la instancia que corresponda el inicio de la investigación de cualquier hecho irregular.
La fiscal había dicho que nadie había denunciado el audio; pero, no hacía falta para que procediera. Después tuvo que recoger velas porque se le demostró que había suficientes elementos jurídicos que comprometían la responsabilidad del Ministerio Público y la de ella misma como fiscal si no ordenaba la averiguación.
La fiscal designada es chavista, aunque en la página de Aporrea la reconocen como vinculada al proceso pero que actúa apegada a la Constitución.
Será esta una prueba de fuego para ella, porque la investigación debe comenzar por la pesquisa de la voz de Mario Silva, para determinar si es su propia voz.
Para los efectos jurídicos no sólo basta con que la persona lo admita, ya que deben haber otros elementos complementarios, para que no haya la menor duda.
-Tomando en consideración que la propia fiscal general de la República ya trató de sacarle el cuerpo al caso, ¿no cree que a ese asunto le van a echar tierra?
-Eso va a depender de la opinión pública, del seguimiento que hagan los medios de comunicación, de los partidos políticos y, en general, de los venezolanos decentes. A esta funcionaria hay que exhortarla a que utilice de una vez el espectógrafo de voces, que determine que esa voz, sin duda, es la de Mario Silva.
Tiene además que determinarse si Silva está hablando en verdad con una persona de nacionalidad extranjera, indicó. Se encontrará en el audio con unas expresiones hechas con un nítido acento cubano, lo cual corrobora el propio Mario Silva cuando identifica al funcionario, Aramís Palacios, agente de inteligencia de Cuba.