Con humor negro verán la psicología femenina con las protagonistas de Divinas, que se presenta este domingo a las siete de la noche en el teatro Juares
Un recorrido por el amor, el sexo, el deseo y la locura, es lo que ofrece la pieza teatral Divinas, que este domingo llega al teatro Juares de Barquisimeto para recorrer la psicología femenina en medio de una tragicomedia, a las siete de la noche.
Astrid Carolina Herrera, Juliet Lima, Dayra Lambis y la maracucha María de los Ángeles Del Gallego, son las protagonistas de esta comedia que le garantiza una sesión de risas al público, gracias al histrionismo con el que encarnan cada uno de los textos escritos por la venezolana Indira Páez, ganadora del premio Emmy.
En Divinas podrán disfrutar de cuatro monólogos, dos diálogos y una escena final con las cuatro actrices en medio de una escenografía y musicalización que logrará conquistar al público.
Así lo anunció Astrid Carolina Herrera, la Miss Mundo 1984, que logra estremecer a hombres y mujeres con su calidad actoral, a la hora de interpretar a La señora y La viuda, sin dejar por fuera a Las mujeres de casco ligero, el diálogo que comparte con la joven pero no menos profesional, Juliet Lima.
Situaciones extremas
«Si bien es cierto que vamos a recorrer la psicología de las mujeres, la vamos a ver desde un punto de vista bien oscuro, medio enfermizo, porque tiene ese cinismo especial con el que le gusta escribir a Indira (Páez). Son casos que le pasan a las mujeres, pero llevados a sus extremos», describió Astrid Carolina Herrera.
La ex reina de belleza y actriz adelantó parte de lo que verán en sus actuaciones. Dijo que La señora está cansada de tener un esposo perfecto y por eso decide serle infiel con un hombre que la haga sufrir, ya que no tiene con quién discutir ni de qué quejarse. Además, La viuda tiene que pasar por la calamidad de velar a su marido el mismo día que ella cumple años y, con lo mucho que le gusta celebrar, deja de recibir felicitaciones para escuchar el pésame de quienes la visitan al momento de cremar al hombre con el que estuvo casada por 25 años, aun cuando él quería ser enterrado.
Después de tales referencias, Herrera concluye que siempre habrá una reflexión, y la suya es «que uno tiene que estar claro en la vida y seguir los impulsos auténticos del corazón, que siempre hablan de forma correcta aunque la cabeza se empeñe en otra cosa (…) porque a veces tomamos decisiones sólo por la presión social y terminamos cometiendo grandes errores».
Para ella, es saber hasta dónde luchar, visualizar las señales y retirarse a tiempo.
