La guerrilla comunista de las FARC negó «categóricamente» este miércoles en La Habana haber secuestrado a dos españoles, capturados el viernes por hombres armados en el noreste de Colombia, y afirmó que mantiene su política de no secuestrar civiles anunciada en febrero de 2012.
«Rechazamos categóricamente este nuevo absurdo de estar acusando a las FARC de acciones de delincuencia común (…), y reiteramos que la orden dada por el Secretariado Nacional del Estado Mayor de las FARC de cero retenciones de personas se está cumpliendo en todo el territorio nacional», dijo Andrés París, miembro de la delegación del grupo guerrillero en las conversaciones de paz con el gobierno colombiano en La Habana.
Los españoles Ángel Sánchez Hernández y María Concepción Marlaska, quien aparentemente es familiar del conocido juez español Fernando Grande-Marlaska, fueron tomados como rehenes el viernes con fines extorsivos por hombres armados en el departamento de La Guajira, fronterizo con Venezuela.
«Por el momento no podemos confirmar si fueron las FARC, el ELN, la delincuencia común o algún otro grupo armado ilegal que opera en la zona. Sólo se procede con la investigación», señaló el martes un vocero de la policía antisecuestro colombiana.
La Guajira es uno de los 32 departamentos de Colombia, ubicado sobre el mar Caribe, que comparte una frontera común con el estado venezolano del Zulia. Allí habitan diversas comunidades indígenas y operan guerrillas de izquierda, grupos criminales emergentes integrados por exparamilitares de derecha.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la mayor guerrilla de Colombia con unos 8.000 combatientes, se comprometieron el 2 de febrero de 2012 a cesar los secuestros de civiles con fines extorsivos.
Actualmente, las FARC mantienen en La Habana conversaciones de paz con el gobierno de Juan Manual Santos.
