La asamblea permanente de los trabajadores de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA) se mantendrá hasta el 23 de mayo, fecha prevista para el inicio de la denominada hora 0 por parte de las asociaciones de docentes afiliadas a la Fapuv.
Mientras el día se acerca, los empleados administrativos, docentes, obreros y estudiantes mantienen acciones conjuntas para exigir un mejor presupuesto, incremento salarial y reivindicaciones estudiantiles.
Tras la asamblea del lunes, realizada en el auditorio Ambrosio Oropeza, decidieron marchar hasta El Cardenalito del este. Recorrieron la avenida Morán y la avenida Venezuela hasta concentrarse en la entrada de la ciudad, donde cerraron la vía de forma parcial, por espacio de media hora.
En las distintas actividades realizadas han aplicado diversas estrategias con el fin de recaudar fondos para el traslado y la logística de participación en la gran concentración nacional, que tendrá lugar el 22 de mayo en Caracas. El viernes de la semana pasada vendieron golosinas y pan dulce, ayer realizaron una operación pote.
Deborah Velásquez, presidenta de la Asociación de Profesores de la UCLA (Apucla), informó que en la asamblea del lunes evaluaron la realización de una caminata de un grupo de trabajadores hacia Caracas. “En respaldo a quienes están entusiasmados con esa posibilidad decidimos que era necesario planificarla de la mejor manera para una próxima fecha y en cambio abogamos por marchar juntos hacia El Cardenalito, con el fin de dejar claro que los universitarios seguimos en conflicto”.
De igual forma, difundieron la novedad de la instalación de una mesa de negociación en el Ministerio de Educación Universitaria para la discusión del contrato colectivo único, con la participación de diversas federaciones.“Lamentablemente, esa convocatoria no fue extensiva a la Fapuv, pese a que agrupa a 18 universidades del país”, acotó Velásquez, quien recordó que el jueves 23 habrá una junta directiva en la que se tratará el tema.
La lider gremial reconoció y agradeció el apoyo de los estudiantes, pese a que las acciones implican la suspensión de actividades. “Más allá de un ajuste salarial, exigimos mejores becas para los alumnos y un presupuesto justo que garantice la calidad académica en el seno de nuestra institución”.
La UCLA aspira aportar un buen número de trabajadores a la concentración nacional de la comunidad universitaria, el miércoles frente a la sede del despacho de Educación Universitaria.
“Lo inmediato es la revisión de salarios y las becas estudiantiles”, apuntó y al mismo tiempo indicó que la posición de los docentes frente a una convención única es que la misma debe estar libre de ideologías políticas y basada en el respeto a la pluralidad de las universidades.
En tanto, Rubén Dario Albornoz, presidente de la Asociación de Trabajadores Administrativos (Ataucla), destacó que todas las actividades se llevan a cabo de forma consensuada. “Somos un equipo y todas las acciones son discutidas antes de ser ejecutadas… los administrativos también iremos el miércoles a Caracas”.
La petición del sector respecto a la convención colectiva es que se respete lo establecido en sus 157 clausulas. “Estaremos vigilantes frente a posibles negociaciones que se puedan realizar a espaldas de los trabajadores; la convención única refleja, en parte, lo que exigimos a raíz de que se dejaron de lado las normas de homologación y la normativa laboral”.