Mienten, no quieren diálogo

El proceso de anarquización que llevan a cabo el fascismocomunismo, en manos de criados de los hermanos Castro, es desmembrar las bases de la democracia y establecer el régimen que se equipare al de Cuba, al igual que lo hacen en Nicaragua, Bolivia, los gobiernitos de las islas del caribe, y cualquier otro país, que con el pretexto de independizarse del Imperio juega a la implementación e imposición del comunismo, por la vía fascista, en su territorio. Para esa función no sirven personas educadas, cultas, conocedoras de derechos y deberes, sino truhanes de baja ralea, malandros de la peor calaña, que en su vida y trayectoria solo ha servido la experiencia del daño al prójimo.
En Venezuela, desde el 2000, han venido paulatinamente sembrando posiciones ajenas a la constitución que ellos crearon y que como no les sirve para seguir desangrando al país, la violan, las veces que les viene en gana, por tener secuestrado todos los factores de poder de la Republica, inclusive las FANB, que están al servicio de los cubanos y los intereses de los hermanos Castro, quieren que el pueblo obedezca a una legalidad que oprime y excluye.
Los dirigentes del malandrismo fascistocomunistas del régimen, expertos en montaje, tratan de imponerse en la Asamblea Legislativa, a como dé lugar, el objetivo, hacer abandonar a los diputados de la disidencia del Parlamento, constituirse en única fuerza y nombrar, lacayos de los Castro en el resto de los órganos del Estado que tiene disponibles los cargos. Ahora, se pretende hacer parlamentarismo de calle, el objeto, es congregar parte del lumpen en los alrededores donde se pretende realizar la sesión para intimidar y agredir los diputados de la democracia que se atrevan asistir a esos actos populistas. Son instrucciones de Cuba, ni un milímetro atrás, hay que afianzar la “revolución”, radicalizar todos los sectores de la vida nacional.
Los principios del derecho parlamentario son: de libertad, legalidad, igualdad, proporcionalidad, constitucional, representación, deliberativo, de orden o de control, de información. No los respetan, porque no es la idea dejar que funcionen los órganos del Estado en forma democrática. Todos los representantes del oficialismo, de un léxico lamentable, solo quieren un órgano que responda al capricho de quien administra al Estado.
Vergonzosa, la postura de la Directiva del Parlamento, sin excepción, cobardes -porque el que le pega y deja que le peguen a una mujer-, es un vil cobarde, agredieron a los demócratas por estar conscientes que el voto del diputado o diputada es personal, el voto debe reflejar el dictado de su conciencia.
¿Por qué no emulan la conducta de J.T. Monagas, y liquidan la Asamblea, y la caricatura de dictadorzuelo, se baldonee como le venga en gana? Ahora, que no tiene cimiento, por ilegitimo, regalando lo que le queda a la nación, pretende reforzase en el exterior con los pordioseros del Continente. Repetimos, no nos cansaremos, la disidencia es la mayoría del país y lo es por convicción y la minoría oficialista es por conveniencia, por lo tanto triunfara la democracia por conciencia.
A los “conciliadores-fatuos”, entiendan que ningún gobierno comunista permitió el diálogo y entendimiento con la disidencia, aquí la vía es seguir presionando por la vía democrática la salida de estos malandros, truhanes del poder.
@rabayma