Beneficiados desconocen el sistema de pago, monto a cancelar e instituciones donde realizar los respectivos depósitos
El pasado jueves, el presidente Nicolás Maduro, instó a pagar a los beneficiarios por casas de la Misión Vivienda que se han entregado en todo el país desde el año 2011.
La necesidad de crear un registro mediante el cual las familias beneficiarias comenzaran a pagar las unidades habitacionales forma parte de un mecanismo, mediante el cual el Gobierno destinará los recursos recaudados a un Fondo Central de Vivienda que, a futuro, permitirá al gobierno “tener músculo” para construir más obras.
En el 2011, el presidente Hugo Chávez planteó un subsidio de hasta 100% para las familias con ingresos mensuales menores al salario mínimo. Sin embargo, la medida sólo se mantendría por un lapso de dos años; mientras los beneficiarios lograran superar su situación económica.
En febrero el Banco Nacional de Vivienda y Hábitat estableció además que aquellos que devengaran un salario mínimo gozarían de un subsidio del 80% del valor de la vivienda; con dos salarios mínimos 54,1%; con tres 30% y hasta cuatro un 10% de subsidio. El plazo de financiamiento es de hasta 30 años.
Sin embargo, los beneficiados de la Gran Misión Vivienda aún desconocen los mecanismos para comenzar a cancelar sus respectivas viviendas, el monto de las mismas y los aranceles mensuales de sus pagos.
“Nosotros somos profesionales y no queremos que nos regalen el apartamento, pero después de dos año que tenemos en nuestro hogar, nadie nos ha informado cómo será el método de pago, a dónde tenemos que dirigirnos y en cuántas cuotas podremos ya tener cancelada nuestra vivienda”, aseguró Carlos Hernández, uno de los habitantes de las Residencias Larense en Patarata, complejo habitacional que fue entregado a mediados del 2011 como parte de la Misión Vivienda en Barquisimeto.
Como él, cientos de familias desconocen el procedimiento y, mientras no sean informados, la recaudación seguirá siendo infructuosa.
Hasta la fecha, el Gobierno Nacional ha entregado 381 mil casas en todo el territorio nacional, de las cuales ninguna ha comenzado a pagarse por sus beneficiarios. Además, en algunas urbanizaciones, los detalles de construcción e infraestructura aún no han sido solucionados. Filtraciones, caminerías, asfaltado, además de los servicios de agua y luz son elementos que deberían poseer estos complejos habitacionales y en muchas casos brillan por su ausencia.
Maduro insistió en que los favorecidos por el programa habitacional deben cancelar de acuerdo con sus ingresos “sobre la base de unos cálculos justos”, y destacó que quienes no puedan hacerlo realizarán “pagos simbólicos de aunque sea 100 bolívares”. “Yo estoy seguro que el que tiene su vivienda quiere aportar de manera justa. A nosotros nos mueve un gran corazón solidario socialista, pero las cosas no pueden ser regaladas”, insistió.
Si pensamos resolver el déficit de vivienda en Venezuela durante los próximos quince años, se deben construir 4.12 millones de viviendas en ese período. Eso implica un promedio de construcción de 275 mil viviendas al año, urbanizar 3.832 hectáreas anualmente y una capacidad de subsidio que permita que las familias puedan cancelar, en extensas cuotas, la totalidad de las viviendas otorgadas.
Sin información
Ante el anuncio presidencial, muchos son los ciudadanos desinformados. El equipo de EL IMPULSO se dirigió hasta la sede del Instituto de Vivienda y Hábitat, para conocer los procedimientos que, a partir de este momento deberán seguir los beneficiarios de la Misión Vivienda para cancelar sus casas y apartamentos, pero ningún funcionario de la institución logró dar algún tipo de información.
Esperan las directrices del Ministerio de Vivienda para comenzar el registro y posterior recaudación de acuerdo a la capacidad de pago de las familias beneficiadas.
Tampoco en el Banco Nacional de Vivienda y Hábitat (Banavih), tienen algún tipo de información sobre los pagos. Ayer los usuarios se mantenían realizando sus operaciones acostumbradas, consultas y solicitudes.
Según información de la Gran Misión Vivienda, el costo de las casas está situado en un máximo de 300.000 bolívares, con plazos de financiamiento de hasta 30 años, con las modalidades de financiamiento, que abarca desde subsidios para las familias de menores ingresos hasta condiciones preferenciales para la clase media, como el otorgamiento de créditos sin inicial.