Nicolás Maduro, retomó este jueves la propuesta de establecer precios justos y accesibles para el pago de las viviendas a las personas atendidas por la Gran Misión Vivienda Venezuela para de esa manera «ir teniendo recursos, músculo financiero, para construir el resto de cosas que hay que construir».
Durante la entrega de viviendas en El Remanso Casas, en el estado Barinas, Maduro destacó: «Las cosas no pueden ser regaladas, el pueblo no las quiere regaladas. En primer lugar, el pueblo está acostumbrado a ganarse sus cosas bregando. Si alguien sale a ganarse sus cosas sudando, es el trabajador, la obrera, el obrero, el trabajador, el pueblo. Los burguesitos no».
Por lo tanto, orientó al ministro para la Vivienda y Hábitat, Ricardo Molina, a levantar el debido registro para que cada ciudadano que posea los recursos cancele, de manera justa, la vivienda donde ahora cuenta con mejor calidad de vida.
Aclaró que quien no posea recursos para pagar, se le asignarán otras tareas para dar un pago simbólico, «para que no sientan que se les está regalando sino que se está ganando con sudor su vivienda», dijo.
Durante la actividad de este jueves, el presidente Maduro ratificó el llamado al cese de la violencia en el país y resaltó que el Gobierno Nacional no descansará en su empeño de mejorar la seguridad.
«Chávez me dejó para hacer revolución y no para estar acomodando mi nombre. Nos dejó para resolver problemas y una tarea, de corazón, que nosotros queremos resolver, es el tema de la seguridad», enfatizó.