Con este Tribunal Supremo de Justicia, tomando en consideración que sus integrantes han mostrado claramente su adhesión al Gobierno, la impugnación será un proceso muy lento, que posiblemente consuma los seis meses, dijo Francisco “Pancho” Ramos, quien fuera delegado del Consejo Nacional Electoral en Lara por más de veinte años.
Las impugnaciones parciales se han realizado en corto tiempo, recordó. Ejemplos tenemos en Lara con la que se hizo después de las elecciones en las que participaron Macario González y Mariano Navarro, ya que se llevó a cabo en siete centros de votación ubicados en el medio rural. Igualmente hubo una impugnación por la Alcaldía de Morán, donde se impuso Radamés Graterol. En ambas se tomaron como referencia los cuadernos de votación, para determinar la identidad de los votantes y sus huellas dactilares.
Pero, hoy tenemos un problema muy grave: el CNE no quiere soltar los cuadernos de votación y ha informado que se están auditando las actas con los votos emitidos; pero, eso no fue lo que pidió Henrique Capriles y el Comando Simón Bolívar, motivo por el cual el candidato de la Unidad pidió la anulación de todo el proceso comicial que el organismo electoral adjudicó a Nicolás Maduro como triunfador; y, posteriormente, el comando de campaña de oposición reclamó la revisión de más de cinco mil centros de votación, donde ejercieron su derecho más de 230 mil personas.
Las dos impugnaciones tienen sentido y habrá que esperar que se constituya en pleno la Sala Electoral, donde ya fue designado un presidente y dos magistrados, la presidenta y el vicepresidente anterior, no podrán decidir porque, como todos sabemos, son fichas del Partido Socialista Unido de Venezuela, ya que fueron diputados ambos.
-¿Cuánto tiempo habrá que esperar?
-Es posible que la tardanza sea hasta de seis meses. Indudablemente, tengo la impresión de que el TSJ y particularmente la Sala Electoral le dará largas al asunto, pues está en juego la Presidencia de la República. No podemos olvidar la decisión de ese tribunal cuando determinó que Nicolás Maduro podía ejercer el Ejecutivo Nacional, violando la Constitución y hasta el propio deseo de Chávez, al declarar que se trataba de la continuidad administrativa del régimen.
Entonces, no podemos creer que actuará con celeridad.
