Este lunes también fueron suspendidas las actividades académicas en el Liceo Bolivariano Francisco José Rojas de Cabudare porque se realizó una asamblea que suponía la entrega de cuentas por parte de la dirección de la institución, a petición de padres, representantes, cuerpo de profesores, administrativos y alumnos.
Una comisión de la Zona Educativa de Lara y de la Dirección Municipal de Educación, el Consejo Municipal de Derechos del Niño y Adolescente y voceros de los diferentes organizaciones comunitarias del sector, se dieron cita para escuchar la rendición de cuentas.
Los alumnos gritaron consignas en contra de la directora, rechazando de plano su informe de cuenta y exigiendo a la Zona Educativa la destitución de la docente.
Por su parte, el profesor Moisés Parra, subdirector académico, fustigó la rendición de cuentas calificándola de tardía.
Reconocimiento de partes
Bertha Torres, jefa de la División de Distritos Escolares de la Zona Educativa de Lara, acotó que se hicieron presentes para escuchar los diferentes argumentos y alcanzar un entendimiento.
-Esta problemática no es ninguna otra que rendir cuentas de la gestión escolar que los alumnos están reclamando, subrayó.
En la asamblea, dijo, participan los alumnos, los padres y representantes, el consejo educativo, constituido para buscar entre todos una solución más humana al conflicto, apegada a la Ley.
La representante de la Zona Educativa refirió que la profesora Esmeralda Lara, directora del plantel, hizo la rendición de cuenta y asumió que lo realizó de manera retrasada, pero en líneas generales no se evidenció irregularidades.
A tal efecto, el profesor Moisés Parra, la otra parte que exige cuentas, presentó su informe en medio de la aceptación del colectivo.
Torres solicitó el aval en físico de la rendición de cuentas de ambos representantes, “pero aquí el problema es de reconocimiento y comunicación, por tanto no es grande ni complicado”.
Respondió a la pregunta sobre el deterioro crítico de la institución, que no conocía a ciencia cierta los problemas de la infraestructura, por estar estrenándose en el cargo, pero que la semana entrante entregaría un formato para especificar las necesidades y deficiencias.
En desacuerdo
Moisés Parra explicó que decidieron pronunciarse con relación a una serie de irregularidades en lo académico, administrativo y gremial.
-Estamos pidiendo cuentas de nueve mil bolívares que hemos recogido con el trabajo de los muchachos para emplearlo en mejoras de la institución, sin obtener respuestas, esgrimió.
Esmeralda Lara anotó que soportó cada bolívar recaudado e invertido, “pero exijo que se limpie mi nombre mancillado por el profesor Parra con mentiras y manipulaciones”.
