Después de casi una década de no trabajar con compañías discográficas, el cantante colombiano Carlos Vives presentó recientemente su Corazón profundo, un álbum que emana romanticismo al ritmo de los acordeones y tambores del vallenato caribeño.
En ocasión de promocionar este nuevo material, Vives se encuentra en México, donde admitió: «lo que más rescato de la música que heredamos es el romanticismo, el trato a la mujer».
El cantante, nacido en Santa Marta, dijo que el primer sencillo titulado Volví a nacer es una canción de amor para su esposa, que además ilustra bien lo que significa para él a la esfera internacional.
«Con mucho gusto, volvemos con música nueva», dijo.
Rock de mi pueblo (2004), una producción de Emilio Estefan y que llevó al colombiano a ganar el premio Grammy al Mejor álbum tropical contemporáneo, fue el último que el colombiano realizó con un sello discográfico internacional.
Tras ese disco «me tomó tiempo regresar, no tenía la oportunidad», comentó Vives, quien se había dedicado desde entonces a escribir y producir discos para otros artistas colombianos y a trabajar en música para niños.
En 2009, el músico de sonrisa amplia y piel bronceada lanzó Clásicos de La Provincia II, en alianza con una importante cadena de supermercados en Colombia, pero esta producción independiente no atravesó las fronteras de ese país.