Microsoft acaba de anunciar que el próximo mes de junio lanzará una beta pública de Windows Blue. El lanzamiento se realizará en el marco del BUILD 2013, la conferenciad de desarrolladores que se celebra del 26 al 28 de junio en San Francisco
Esta mañana, nos presentaban algunos detalles sobre Windows Blue, la esperada actualización de Windows 8 que parece destinada a reconciliar a Microsoft con todos aquellos usuarios que no se han visto convencidos por el nuevo paradigma que presentaba Windows 8 y que, incluso, podría recuperar el clásico escritorio. Teniendo en cuenta que Microsoft había convocado el BUILD 2013 para el mes de junio, se barajaba la posibilidad que este evento fuera el lugar en el que la compañía nos iba a mostrar esta actualización; un rumor que acaba de ser confirmado por la compañía a través de su blog anunciando que el próximo mes de junio llegará a beta pública de Windows Blue.
La encargada de dar la noticia ha sido Julie Larson-Green, Vicepresidenta de Microsoft para Windows, durante un evento organizado por Wired (el Wired Business Conference) donde además de hablar del proceso de concepción de Windows 8 y su enfoque en la convergencia con la movilidad, ha anunciado quedurante el BUILD 2013 la compañía nos “abrirá la puerta” al Windows Blue que están “cocinando” ylanzarán una beta pública para el próximo mes de junio (fecha en la que se celebra el evento de Microsoft para desarrolladores).
Precisamente, fue en el BUILD de 2011 cuando Microsoft nos mostró la primera beta pública de Windows 8 y fue donde tuvimos una primera toma de contacto con el interfaz Metro e, incluso, se distribuyeron unas tabletas con esta preview para que pudiésemos vislumbrar las posibilidades de este sistema operativo y cómo éste podía funcionar en dispositivos móviles (aunque fuesen un prototipo). Dos años más tarde, Microsoft vuelve a emplazarnos a su evento de desarrolladores para lanzar la beta pública de Windows Blue y mostrarnos cómo han manejado el feedback recibido con Windows 8 y cómo lo han trasladado a esta actualización para cubrir todas esas carencias o aspectos mejorables que han hecho que la implantación de Windows 8 no haya funcionado al ritmo que Microsoft esperaba.
Otro detalle importante de Windows Blue es que supone un cambio de filosofía en Microsoft; un cambio en la forma de trabajar que abandona los ciclos largos de desarrollo (con grandes actualizaciones cada 2 o 3 años en los productos) para apostar por los ciclos cortos y la mejora continua, es decir, apostar por cambios basados en actualizaciones. El cambio de modelo, sin duda, suena bien pero otro de los grandes misterios que quedan en el aire, y que quizás se resuelvan en junio, es si las actualizaciones serán gratuitas o requerirán del abono de una cierta cantidad de dinero.
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