El sector cultural venezolano manifestó a través de un comunicado su preocupación tras la detención del director norteamericano Timothy Tracy, por parte de las autoridades nacionales, cuando rodaba un documental sobre el proceso sociopolitíco de nuestro país.
Expresaron que la medida “lesiona la libertad de expresión en Venezuela” y están a la espera de un pronunciamiento preciso respecto al caso, debido a que las circunstancias y los informes judiciales son “confusos”.
Tracy, de 35 años de edad, se instaló en Venezuela antes del 7 de octubre de 2012 para cubrir las elecciones presidenciales y, posteriormente, dar seguimiento a los comicios regionales el 16 de diciembre, el desenlace de la enfermedad que afectó al presidente Hugo Chávez y continuó con el otro proceso de votación que ocurrió el pasado 14 de abril.
“Tracy se relacionó con todos los factores comprometidos en uno y otro campo de nuestra polarización política y visitó numerosas comunidades de los más variados sectores socio económicos, a objeto de registrar sus actividades y enfoques, con el único recurso de su cámara audiovisual”, indicaron los cineastas, escritores, artistas, periodistas e intelectuales que firmaron la Carta por Timothy Tracy, como una muestra de apoyo al realizador acusado por el Gobierno nacional de “desestabilizador”.
Señalaron que Tracy cumplía con los deberes de un documentalista objetivo y lo corroboran testimonios de representantes del oficialismo, la oposición y la comunidad organizada. “Realizaba un serio y profundo trabajo sobre nosotros”.
En este sentido, explicaron que la situación política del país en los últimos 15 años “se ha convertido en el escenario privilegiado para investigadores, cineastas y periodistas de todo el mundo que vienen con el propósito de recabar realidades que luego ofrecen, bajo su propia óptica interpretativa”.
Recordaron que el sector en el poder ha sido promotor de numerosas visitas para que figuras involucradas al quehacer cultural acudan a Venezuela y producto de esos viajes salgan trabajos literarios y audiovisuales.
“No todas las visiones que ofrecen los visitantes les resultan favorables, como es lógico en un mundo democrático y multipolar”.
“Expresamos nuestro desacuerdo con la detención en territorio venezolano de quien es, a todas luces, un cineasta en ejercicio de su libre actividad de producción audiovisual. Y en especial, nuestra condena a que se utilicen los registros videograbados por él, y confiscados por un cuerpo polícial, como expedientes para perseguir y acusar judicialmente a ciudadanos venezolanos” reflexionaron.
Solicitan a las autoridades transparencia pues la tarea del profesional “ha sido interrumpida bruscamente por motivos políticos”.
Según el gremio artístico y cultural hay poca evidencia acerca de los presuntos actos ilegales que acarrean al arrestado.
Advierten que el Gobierno estaría incurriendo en una “violación específica de la libertad de recoger y divulgar información en su territorio, la cual está garantizada en la Constitución vigente”.
Hasta la fecha más de 150 venezolanos ligados al acontecer cultural han expresado su apoyo a favor de la campaña denominada Carta por Timothy Tracy.
El documentalista natural de Michigan fue detenido el pasado 25 de abril en el aeropuerto Internacional Simón Bolívar.
Recientemente, la abogada del imputado, Gloria Stifano, declaró que la filmación del joven no compromete la seguridad del Estado.
Alejandro Bellame, cineasta, llamó a no confundir los trabajos de investigación con delitos de espionaje. Aclaró que los trabajadores del séptimo arte viven para captar hechos interesantes y mostrarlos al mundo.